Desde el Ministerio de Desarrollo Humano, adhieren a esta fecha que apunta, sobre todo, a evitar el consumo del tabaco para disminuir el impacto letal que ocasiona en la salud de las personas.
Por decisión de la Asamblea Mundial de la Salud, a partir de 1987, el 31 de mayo de cada año, se recuerda en todo el planeta el Día Mundial Sin Tabaco, que tiene por objetivo principal, informar y concientizar a las personas sobre los efectos nocivos y letales que ocasiona el consumo del tabaco en la salud, como también a la exposición pasiva al humo de esta sustancia.
En el 2022, bajo el lema “El tabaco envenena nuestro planeta”, pretende dar a conocer a la comunidad mundial los perjuicios que las empresas tabacaleras causan al medio ambiente, los cuales son de gran magnitud y van en aumento, agravando la escasez de recursos y la fragilidad de los ecosistemas.
Al mismo tiempo, apunta a divulgar las prácticas comerciales que llevan adelante las empresas tabacaleras para fomentar el consumo del tabaco y acentuar la importancia de la lucha contra el tabaquismo.
Desde la cartera de salud provincial, reivindicaron la necesidad de continuar trabajando fuertemente para evitar el consumo de esta sustancia, teniendo en cuenta que el tabaquismo “es una de las mayores causas de muerte prevenible, a la que nos enfrentamos los equipos de salud”.
El consumo del tabaco “es causante de la muerte de más de 8 millones de personas en el mundo anualmente”, afirmaron. Además, destruye el medio ambiente, constituyendo una razón más para dejar de fumar, teniendo en cuenta que todas las etapas de su ciclo de vida: cultivo, fabricación, distribución, consumo y eliminación de sus desechos “dañan a la salud de las comunidades”.
En este marco, los equipos de salud, aprovechan esta fecha para insistir en el derecho a la salud, a una vida más sana y a la protección de las futuras generaciones, difundiendo y sensibilizando a las personas sobre los riesgos graves que implica el tabaquismo.
Está demostrado que muchas enfermedades son causadas por el tabaquismo, incluyendo al fumador pasivo, es decir la persona expuesta al consumo del humo del tabaco. Entre dichas enfermedades se encuentran con mayor frecuencia: las cardiovasculares, respiratorias y cánceres que afectan a distintos órganos.
Asimismo, el consumo de tabaco es uno de los primordiales factores de riesgo asociado a las muertes prematuras, a los años de vida perdidos por discapacidad y a los años perdidos de vida saludable.