La Comisión de Transporte de la Cámara de Diputados de la Nación, recibió este martes a la subsecretaria de Transporte Automotor de Nación, María Laura Labat, al secretario de Transporte, Diego Giuliano, integrantes del Ministerio de Transporte de Nación, y a las autoridades del Comité Federal de Transporte (COFETRA) para exponer sobre el reparto de subsidios al transporte público de pasajeros en las provincias.
En ese marco, el diputado nacional Ramiro Fernández Patri, afirmó que en las últimas semanas se presentaron numerosos proyectos, de varios sectores políticos, en ambas Cámaras del Congreso para dar una respuesta equitativa y justa a todas las jurisdicciones del país.
“Es imprescindible equiparar el reparto del subsidio al transporte. Este es un reclamo que nuestro gobernador, el dr. Gildo Insfrán, junto con los gobernadores del Norte Grande vienen realizando hace tiempo sobre el reparto desigual de los subsidios en el AMBA (Ciudad y Conurbano bonaerense), que concentran entre el 85% y 87% de los subsidios, dejando solamente entre un 15% y 13% a repartir entre las distintas provincias” precisó.
Fernández Patri agregó que algo peor sucede con el subsidio al gasoil, que el AMBA tiene 1000 millones de pesos y las provincias 0 (cero). “La evolución de subsidios y compensaciones del AMBA y provincias, desde el 2015 al 2019, se redujo de $11.539 a $8.519 millones de pesos en las provincias. Mientras que en el AMBA, pasó de $25.101 a $44.266 millones de pesos. Y desde el 2019 al 2021, en las provincias el subsidio pasó de $8.519 a $30.999 millones de pesos, registrándose un aumento considerable, pero sosteniendo las asimetrías con el AMBA, que pasó de $44.266 a $100.678 millones de pesos.”
En Capital Federal y Conurbano Bonaerense las tarifas no se actualizan desde 2019, el boleto inicial es de 18 pesos, mientras que en las restantes jurisdicciones del país van desde los 24 hasta los 80 pesos, dependiendo de los propios recursos que los distritos destinen a este sector.
En ese sentido, el legislador destacó que el gobierno nacional tomó cuatro medidas importantes en este tiempo: 1) El aumento de la participación en el financiamiento del transporte público de pasajeros, que desde el inicio de la gestión se triplicó y luego se aumentó un 60% sobre lo triplicado; 2) El traspaso a CABA de las 32 líneas que entran y salen de CABA, que estaban contempladas en el subsidio de Nación. 3) La expansión de la tarjeta SUBE a las provincias, que ya llegó a 46 ciudades y permite el subsidio a la demanda, (beneficiar a los sectores más vulnerables como jubilados, ex combatientes, beneficiarios de la AUH, empleadas domésticas, con un descuento del 55% en la tarifa.) 4) El aumento de las tarifas que habían quedado congeladas durante la pandemia.
Asimismo, Fernández Patri explicó lo que señaló COFETRA, (órgano del cual participan todas las autoridades de transporte del país que lo integran), que hay elementos que las provincias no pueden fijar, como el costo de la mano de obra de los transportistas, ya que primero se hacen las paritarias en CABA y luego eso genera que los trabajadores de la UTA del resto del país quieren igualar ese mismo aumento. “Lo que sucede es que en CABA, ese aumento se cubre con el subsidio que recibe de Nación, pero en las provincias no, porque no les alcanza para eso y tienen que pagar con recursos provinciales ese aumento.” En síntesis, Fernández Patri remarcó que “hay provincias que ponen entre el 100 y el 200 por ciento de lo que pone la Nación en subsidios, osea que las provincias terminan haciéndose cargo de ese subsidio.”