En esta ocasión, los equipos de salud promovieron medidas para cuidar la salud durante el verano.
En la comunidad pilagá Ayo La Bomba, ubicada a pocos kilómetros de la localidad de Las Lomitas, los vecinos se interiorizaron sobre una serie de hábitos saludables que apuntan a evitar enfermedades, como también a tener una mejor salud y calidad de vida.
Esto fue a través de una charla, llevada adelante en la comunidad y organizada por el hospital distrital de Las Lomitas, en la que participó un equipo de ese hospital junto a profesionales del nivel central del Ministerio de Desarrollo Humano.
Entre los temas tratados, en primer lugar, hicieron hincapié en la prevención de enfermedades que se pueden transmitir a través del agua. Sobre ello, el equipo de salud remarcó la importancia de que “el agua apta para consumo humano debe ser potable y si tenemos dudas, de que sea potable, tenemos que potabilizarla antes de tomarla, por ejemplo hirviéndola o colocándole 2 gotitas de lavandina por cada litro de agua”.
Se mostraron de manera práctica las formas de potabilización y se recordó que el agua contaminada, puede ocasionar varias enfermedades, siendo una de las más frecuentes la diarrea, que puede afectar, principalmente, a los niños, niñas y adultos mayores.
Asimismo, concientizaron a los vecinos sobre otros hábitos saludables necesarios para mantener la buena salud, como: higiene personal, limpieza del hogar y de los alrededores, para evitar también distintas enfermedades que pueden ser causadas por virus y bacterias y que pueden prevenirse a través de esas prácticas diarias.
Cuidados en los días de altas temperaturas
De igual modo, pusieron énfasis en enseñar a los vecinos sobre los cuidados que deben tenerse en los días de altas temperaturas y sol intenso, recalcando que el golpe de calor y la deshidratación son las enfermedades más frecuentes y de mayor riesgo, que ocurren en las jornadas que presentan esas características.
Acerca de eso, insistieron en que, en los días de calor intenso “es necesario beber abundante agua, siempre potable, como mínimo entre 2 y 3 litros a lo largo del día, ya que el agua posibilita que el cuerpo mantenga una hidratación adecuada” y dar el pecho a los bebés a demanda.
Además, evitar exponerse al sol, sobre todo en los horarios de más intensidad, entre las 10 y las 17 horas y tratar de permanecer dentro de la casa o en lugares con sombra.
Y recomendaron cuidar la piel, como otra de las medidas fundamentales. Para eso, indicaron protegerse del sol mediante el uso de sombreros, ropas de mangas y botamangas largas, preferentemente de colores claros.