Este jueves 23, el gobernador Gildo Insfrán encabezó la inauguración de la refacción y ampliación del exedificio “Gota de Leche” y actual Laboratorio de Vigilancia Epidemiológica.
El primer mandatario fue acompañado por el vicegobernador de la provincia, Eber Solís; el presidente subrogante del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Guillermo Alucín; el intendente capitalino Jorge Jofré; legisladores nacionales; el jefe de Gabinete de Ministros, Antonio Ferreira; el ministro de Desarrollo Humano, Aníbal Gómez; ministros del gabinete provincial; secretarios del Poder Ejecutivo, la fiscal de Estado, Stella Maris Zabala; el director del Laboratorio de Vigilancia Epidemiológica, Juan Carlos Atencia; el doctor Carlos Colombo y directores de hospitales.
En este marco, al tomar la palabra el jefe de Gabinete de Ministros, el doctor Antonio Ferreira, resaltó que esta nueva inauguración es un “un hito de la salud pública formoseña”, destacando que este lugar se erigió cual fortaleza para prevenir y combatir enfermedades, pensado, planificado y construido durante la presidencia de Juan Domingo Perón.
Así, recordó que el general Juan Domingo Perón creó el Ministerio de Salud, al doctor Ramón Carrillo, con la concesión de que la salud llegue a todo el territorio argentino.
Además, señaló que“en palabras de la arquitecta Lucila Hertelendy, fue un proyecto y sistema construido de muy buena calidad, único en su diseño arquitectónico, emplazado en esta ciudad”.
Remarcó que en este edificio se llevó adelante lo que el Modelo Formoseño aplica de manera sistémica, consagrada en la Constitución Provincial, donde se toma como modelo a la atención primaria de la salud.
Subrayó que se hacían atender madres y niños, siendo un lugar que irradiaba confianza, credibilidad y que estaba caracterizado por su calidad de atención y contención. “Por eso hoy, lo seguimos llamando gota de leche, porque vincula a muchos recuerdos, fundamentalmente a la atención con amor y de afecto”.
Y enfatizó en que esto era así, porque “la herramienta fundamental con lo que contaban los profesionales de la salud era su capacidad y su ciencia, ya que en aquellos tiempos no existían equipamientos de alta tecnología”.
Insistió en que el trabajo se basaba fundamentalmente en la capacidad del médico y sostuvo que “con todo esto, en la actualidad, la clínica médica sigue siendo soberana por sobre los equipamientos que puedan existir, porque es el hombre quien tiene que manejar la tecnología y no al revés”.
“Por eso, lo fundamental es la formación y la capacitación que después se complementan con los equipos”, consideró Ferreira, añadiendo que “políticamente nos hemos formado en esa concepción con la conducción del gobernador Gildo Insfrán”.
A su vez, respecto a la evolución del sistema sanitario de la provincia, manifestó que “desde esa atención primaria hasta el actual sistema que tenemos, se demuestra una evolución extraordinaria”.
Expuso que hoy es posible que en este nivel de complejidad creciente que se tiene en Formosa “se realicen trasplantes en el Hospital de Alta Complejidad con absoluta garantía” y agregó que “al día es difícil evacuar a un paciente a otro centro de otra provincia, porque acá tenemos todo y, sobre todo, contamos con recursos humanos”, aseveró.
De este modo, hizo hincapié en que “nada de esto es casualidad”, marcando que todo es posible por la planificación que existe, que es parte de un modelo antropocéntrico, es decir que todas las políticas tienen como centro al hombre y mujer de esta tierra.
Y recalcó que “como sostiene el gobernador Insfrán, la atención de la salud no es solo un acto médico, sino que tiene que ser acompañado por decisiones políticas de obras, escuelas, caminos, energías, agua, vivienda y la tan importante comunicación, que permite un diagnóstico y tratamiento en tiempo real”.
“Es importante que tomemos conciencia de lo que vivimos en tiempos pasados y lo que estamos viviendo actualmente”, afirmó, brindando un reconocimiento especial “a las enfermeras que siempre fueron heroínas”, como también a todos los profesionales de salud, desde aquellos que iniciaron el camino en épocas territorianas, a los que vinieron y a los propios formoseños que fueron a formarse y regresaron para ejercer en su tierra natal.
Por todo esto, al concluir, el jefe de Gabinete reflexionó que “estoy convencido y siento un inmenso orgullo por todas las cosas que hemos logrado” y le dijo a la comunidad: “Ustedes deben sentir lo mismo, porque como dice el Gobernador, no tenemos que tener vergüenza de sostener que en Formosa tenemos el mejor sistema de salud pública, porque tiene calidad y tiene amor”, cerró.