Este espacio asiste a los alumnos internados en el Hospital de La Madre y el Niño y también, a los que se encuentran en sus domicilios y no pueden asistir a la escuela por situaciones de salud. Se trabajan todas las áreas curriculares y cuentan con profesores de música y plástica. Actualmente tiene 12 alumnos domiciliarios y diariamente se matricula en el hospital.
Este viernes 6, a las 15 horas, la Escuela de Educación Domiciliaria y Hospitalaria N° 1, celebró su 53° aniversario, en un ameno acto en el “Hospital La Madre y el Niño”.
Al respecto, la directora, Raquel Regis, marcó que se trató de un día especial, “por llevar tantos años trabajando al servicio de niños y niñas”.
De esa manera, destacó el trabajo de los técnicos, conformado por asistentes sociales, psicopedagogos y docentes de primero a sexto grado, detallando que se desempeñan en educación especial, música, arte, plástica, entre otros. Además, el Nivel Inicial, con sala de cuatro y cinco años.
Agregó que “trabajamos en las salas de pediatría con los niños que se encuentran internados y que por esa misma situación de enfermedad que se encuentran, nosotros brindamos la parte pedagógica”.
Además, se brindan clases en contexto domiciliario, destinado a “aquellos niños y niñas, que son pacientes y no pueden asistir a la escuela, con el objetivo de asegurar “una trayectoria educativa”.
Por su parte, la profesora Cintia Fernández señaló que los alumnos reciben los mismos contenidos que en su institución educativa, afirmando que trabajan de manera articulada con los docentes de los grados de cada niño y niña.
“Acompañamos el proceso educativo de los pacientes, para que puedan seguir estudiando y a la hora de volver a la escuela, estén trabajando los mismos contenidos que sus compañeros”, añadió.
También puntualizó que tienen una matrícula de 12 alumnos domiciliarios y en el efector de salud se hace la matrícula diariamente, comentando que en esta jornada asistieron a 25 estudiantes.
Al finalizar, destacó el rol de las familias, asegurando que “ellos son los que nos permiten atenderlos tanto en el hospital como en el domicilio, los que nos acompañan en este proceso y nos facilitan continuar con la educación con sus hijos”.