El contador Julio Svartz, director de Estadística, Censos y Documentación de la provincia de Formosa, se refirió sobre algunas de las medidas del nuevo presidente electo, Javier Milei, que se pueden llegar a implementar después del 10 de diciembre, teniendo en cuenta su plan de Gobierno expuesto durante la campaña electoral.
Aseguró en declaraciones recogidas por AGENFOR que “tanto sectores empresariales como económicos han manifestado que muchas de las medidas son imposibles aplicarlas, ya que solamente empeorarían la situación económica del país, con una visión de shock que perjudicaría a los sectores más vulnerables”.
El funcionario también señaló que “hablar de dolarización como de la eliminación del Banco Central -algunas de las medidas que plantea Milei- es inconstitucional, puesto que, según lo establecido por la Constitución Nacional, no se puede eliminar ni la emisión de la moneda nacional ni tampoco el organismo regulador”. Sin embargo, acotó que “lo que de última se podría hacer es regular algunas de las medidas de la política monetaria fiscal”.
Por otro lado, declaró que, cuando se alude al “shock”, significa que “lo va a hacer en forma inmediata, es decir, en el más corto plazo posible”, a diferencia de “la visión del gradualismo que se plantea en un proceso por etapas”.
Al mismo tiempo, trajo a colación que el propio Milei “comenzó a aclarar que de muchas de las medidas no se verán los resultados hoy, como la inflación, sino que le pueden llevar entre 18 y 24 meses aproximadamente recién revolverlas”, y “cuando en campaña había dicho que lo podía hacer rápidamente”, recordó.
Mientras que, sobre el tema de la dolarización puntualmente, apuntó que “es un proceso que puede llevar un largo tiempo. Entonces, muchas de aquellas personas que se imaginaban que el 11 de diciembre podrían llegar a tener dólares en sus bolsillos, esto es un error, porque el Banco Central no cuenta con las reservas necesarias”.
Por consiguiente, aclaró que impulsar el proceso de dolarización «llevaría a que se tenga nuevamente que solicitar un préstamo, lo que será endeudar más a la Argentina”, cuando en el escenario de hoy “ya contamos con una presión fuerte del Fondo Monetario Internacional (FMI), ya que seguimos condicionados por él”.
Asimismo, no olvidó que sigue vigente la deuda con ese organismo contraída por el Gobierno de Mauricio Macri. Es más, precisó que, para enero de 2024, por ejemplo, el país tiene que afrontar vencimientos por aproximadamente 5 mil millones de dólares. “Entonces de dónde saldrían los fondos para cubrir la deuda y para dolarizar”, ya que, en esta coyuntura actual, “es imposible hacerla”, pues provocaría «una fuerte devaluación” por tratar de unificar la cotización de la moneda extranjera con respecto al peso, teniendo en cuenta que “existen brechas cambiarias entre el dólar ilegal o blue, el oficial, el dólar agro, el dólar MEP, etcétera”.
Entonces, en definitiva, es un “escenario complejo y difícil” el que se va a transitar desde el 10 de diciembre, porque “inclusive cuando habla de reducir el déficit fiscal ajustando a la política, no afectando a las personas, pensemos que el gasto político que se observa en cuadro del déficit fiscal representa un porcentaje muy bajo, de un 0,2 a 0,4%”.
“Esperemos que el Presidente electo revea muchas de las medidas que piensa implementar, adoptando distintas líneas de acción para que no se termine perjudicando a los que menos tienen”, concluyó.