“Valor Agregado”, un taller del PAIPPA que busca lograr productos naturales para el consumo y la comercialización

La técnica del PAIPPA, Carina Beckley, brindó información sobre el trabajo que realizan en la capacitación de “Valor Agregado”.

Inició explicando a AGENFOR que “lo que hacemos es brindar herramientas necesarias al pequeño productor para que transforme la materia prima natural que tenemos en la provincia y, a la vez, la aproveche al máximo”.

Sostuvo que “siempre es aplicando las buenas prácticas” siguiendo el propósito de “lograr un producto inocuo, natural y apto para el consumo y la comercialización, apuntando a una de las misiones más importantes del Instituto PAIPPA, que es poder vender y generar una mejor calidad de vida para el productor”.

Además, agregó que “otra meta es que en las ferias francas organizadas por el organismo puedan ofrecer sus cosechas y estos productos de elaboración 100% natural”.

Cabe recordar que esta capacitación de “Valor Agregado” es un taller de Educación  Integral de Jóvenes y Adultos (EIJA), articulado por el Departamento de Educación Especial del Ministerio de Cultura y Educación y el Instituto Provincial de Acción Integral para el Pequeño Productor Agropecuario (PAIPPA).

Consistió en cuarto módulos, culminando en la Escuela Especial N° 5 “con la enseñanza de la elaboración de escabeches”, indicó Beckley.

También, “hacemos fuerte hincapié en la importancia de las condiciones de higiene”, ya que se trata de “la aplicación del cuidado de limpieza personal y la esterilización de los frascos a ser utilizados”.

Respecto de lo primero, explicó que hay que “utilizar cofia o un pañuelo en la cabeza, barbijo y guantes o, caso contrario, higienizarse muy bien las manos” y añadió que “debe haber ausencia total de anillos, cremas y perfumes”.

En cuanto a los envases, expuso que “el esterilizado de las tapas solamente es con el pulverizado de alcohol de 70-30 y el secado debe ser al natural, no con servilleta o repasador”.

En este punto, aclaró que “las tapas sí o sí deben ser nuevas, no pueden ser reutilizadas porque la gomita que trae, que es una de las que cumple la función relevante del cerrado al vacío, pierde esa función una vez que se envasa”.

No obstante, los frascos pueden ser reciclados y “deben ser esterilizados en el horno”, cerró.