Tanto en la Capital como en el interior, las brigadas sanitarias acentúan las actividades preventivas, principalmente, para evitar la formación de criaderos de mosquitos.
A lo largo y ancho del territorio, el Gobierno de Formosa, a través del Ministerio de Desarrollo Humano, profundiza las tareas de prevención con visitas, casa por casa, para concientizar a los vecinos sobre la importancia de aplicar los cuidados para prevenir el dengue.
Se recuerda que el mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, vive en las casas y comparte con las personas también otros lugares que habitan cotidianamente, como escuelas, clubes y espacios de trabajo.
Por lo tanto, cumplir con las medidas de prevención para evitar que el mosquito se reproduzca es la medida clave y es una responsabilidad de todos. Eliminar los recipientes que le pueden servir de criadero es fundamental.
También, es muy importante que los vecinos sigan abriendo las puertas de sus casas a los brigadistas, a fin de que puedan hacer su trabajo y puedan continuar difundiendo y enseñando los cuidados preventivos que deben hacerse.
Las brigadas sanitarias recorren los barrios de la ciudad de Formosa y de cada una de las localidades, donde despliegan tareas de fumigación, entregan larvicidas y repelentes, y explican a las familias cuáles son las medidas que deben implementarse diariamente para que la prevención sea efectiva.
Entre esas recomendaciones, hacen hincapié en los pasos que deben seguirse para eliminar de forma correcta los recipientes que no se utilizan y pueden convertirse en criaderos de mosquitos.
A eso, se suma el descacharrizado de los patios, veredas, terrenos baldíos y otros lugares. Y en cada domicilio, dan las instrucciones para la aplicación correcta del repelente, recordando que los virus del dengue se transmiten por medio de la picadura del mosquito.
Asimismo, con demostraciones prácticas, dan detalles de cómo debe utilizarse el larvicida en los recipientes que no pueden ser tapados, para evitar que allí se desarrollen las larvas de los mosquitos, teniendo en cuenta que en pocos días se transforman en mosquitos adultos con alas, que al picar pueden transmitir la enfermedad.
Las indicaciones incluyen cómo debe hacerse la aplicación, en qué cantidades, en qué lugares y con qué frecuencia, recalcando que es un líquido muy efectivo para matar las larvas y, sobre todo, que no tiene ningún tipo de peligro para los humanos ni para las mascotas.
Para completar el trabajo integral que se viene llevando a cabo para combatir el dengue, las máquinas fumigadoras pesadas transportadas en vehículo transitan las calles en distintos horarios del día, efectuando rociados con insecticidas de larga duración, destinado a eliminar a los mosquitos adultos.