En el predio de la familia productora Deoz, en la localidad de El Chorro, se realizó una nueva jornada técnica junto a asociaciones de productores ganaderos de la zona para dar a conocer la experiencia del proyecto piloto de recuperación de ambientes degradados.
Fue organizada por el Ministerio de la Producción y Ambiente, la Municipalidad de El Chorro y el CEDEVA y contó con la participación de REFSA Hidrocarburos y el EEA INTA Ingeniero Juárez.
“En la jornada se contó la experiencia de cómo fue recuperar un ambiente que fue degradado, lo que aquí se conoce como plazuela o peladares, a productores para que se replique la prueba piloto en otros predios”, subrayó la subsecretaria de Recursos Naturales, Ordenamiento y Calidad Ambiental, la ingeniera Natalia Lupia.
Por ello, se entregó a los productores un paquete tecnológico a aplicar para la recuperación de un ambiente degradado y se explicó los pasos a seguir como ser el cierre perimetral, preparación del suelo, elección de la pastura que se adapta a los ambientes del oeste, forestación con algarrobo, manejo del lote de forma sustentable y aguadas.
Lupia resaltó, además, que una de las propuestas de la jornada fue hablar del manejo posterior a la implantación, es decir, el mantenimiento de ese lote para que no haya un retroceso en la prueba y que este beneficio sea utilizado de manera sustentable por el productor.
La subsecretaria agregó que “hubo muy buena participación, a los presidentes de asociaciones le solicitamos que transmitan la información para que entre todos podamos accionar para replicar esta experiencia en otros lotes, que tiene doble beneficio: es ambiental porque recuperamos el suelo y productivo porque le va a proporcionar pasturas en épocas de escasez”.
Los presidentes de las asociaciones Nueva Esperanza y de Productores del Pilcomayo coincidieron que “el encuentro es sumamente importante para la comunidad porque producir pasturas en la zona es muy necesario”. Además destacaron que “estamos conformes con formar parte de estos encuentros porque nos sentimos parte de las decisiones que se toman”.
Esta política del Gobierno de Formosa reúne a lo productivo y a lo ambiental, promueve cambio de usos del suelo positivos y posiciona a Formosa y a su Ley de Ordenamiento Territorial como paradigmáticas en un contexto nacional de suelos degradados y pérdida de materia orgánica.