Este lunes 1º de julio, desde las 18 horas, el Partido Justicialista Distrito Formosa le rindió homenaje al general Juan Domingo Perón por el cincuentenario de su paso a la inmortalidad con un acto encabezado por el gobernador y presidente de dicho espacio partidario, Gildo Insfrán, en la plazoleta donde se erige el monumento del expresidente, ubicado en la intersección de la Avenida 25 de Mayo y la calle Fontana de la ciudad capital.
Estuvieron presentes, también, el vicegobernador Eber Solís; el intendente capitalino, Jorge Jofré; la presidenta alterna del PJ, Ana María Del Riccio; demás miembros de la Mesa Ejecutiva del PJ; ministros de las carteras locales, legisladores nacionales, provinciales y municipales; agrupaciones políticas y público en general a fin al movimiento nacional justicialista.
En ese marco, luego de la entonación del Himno Nacional Argentino y el Himno Marcha a Formosa, Insfrán acompañado por Solís, Jofré y Del Riccio, descubrió una placa recordatoria por el 50° aniversario del fallecimiento de Perón; como así también se dispusieron ofrendas florales a los pies del monumento.
Dichas flores se sumaron a las depositadas previamente por el bloque de diputados justicialistas, concejales justicialistas, la agrupación 17 de Octubre, la agrupación Valores Ciudadanos, la agrupación 19 de Enero, el concejal Horacio Pettit, la Asociación Bancaria Formosa, la agrupación Compromiso Formoseño, la Confederación General del Trabajo (CGT) Regional Formosa y el Movimiento Evita.
Luego de este acto, se realizó un toque de silencio en testimonio de homenaje al tres veces presidente de los argentinos y se oyó el tema musical “Estoy orgulloso de mi general”, interpretado por el cantautor argentino, Leonardo Favio.
Fieles ejecutores
Asimismo, el militante justicialista y ministro de Producción y Ambiente, Lucas Rodríguez, ofició como único orador y al tomar la palabra sostuvo que el expresidente fue una “figura descollante de la historia política, social, militar, económica y cultural de nuestra patria” y aseveró que “ha sido el maestro que nos enseñó el camino y las formas de realización de una Argentina en paz, con trabajo, con dignidad, con justicia social y verdaderamente libre”.
“El sentido histórico de su paso fue poder conjugar los valores espirituales, humanistas y cristiano con las ansias de un resarcimiento material que anhelaba y hoy anhela nuestro pueblo, en una coordenada desbordante de verdades y destinos: la doctrina nacional justicialista”, manifestó.
A su vez, a medio siglo de su desaparición física, Rodríguez puso en valor la “sistematización que hizo Perón de las experiencias históricas de nuestro pueblo y de otros” y consideró que “que han sido exitosas para construir su felicidad y la grandeza de las naciones”, por lo que “se vuelven cada vez más necesarias para hallar las coordenadas de una Argentina y un mundo extraviado en las injusticias de la pobreza, del descarte, por la exacerbación del individualismo y materialismo consumista”.
Y sugirió retomar “el camino universal de una unidad hermanada en el cuidado del más débil y la realización plena de la persona”.
En esa línea, el militante enumeró a la comunidad organizada, los planes quinquenales, las cartas a los pueblos y gobiernos del mundo, el modelo argentino para el proyecto nacional, como “toda la herencia de la que hemos sido depositarios para obedecer a nuestro pueblo y que él sea leal a quienes no lo abandonan”.
Y aseguró que “tienen al Modelo Formoseño y al compañero Insfrán como fieles ejecutores del legado político de Perón” y a Formosa como “reserva ética, moral y política para que nuestra Patria retome el camino de la justicia social”.
“El general Perón se ubicó en las antípodas de las decisiones maquiavélicas que insisten con que el poder se justifica a sí mismo, sin fines trascendentes, donde todo está permitido frente a la tragedia a ese modelo del imperio donde el héroe accede al poder y que está sometido a algo terrible. El general Perón convirtió a la masa en pueblo, le dio conciencia de sí mismo al pueblo argentino”, expresó.
Y concluyó: “Por eso, Perón está en el futuro, su visión y legado proyecta a la Argentina como faro de esperanza en el mundo, porque encarnó el alma de Argentina y encarna los deseos y anhelos de soberanía política, independencia económica y justicia social para los pueblos del mundo sojuzgados por el egoísmo de unos pocos”.
Al finalizar, los presentes entonaron la Marcha Peronista a viva voz.