Medios gráficos como El Cronista y Página 12, televisivos y radiales reprodujeron la noticia sobre la paralización de la Nueva Planta de Uranio (NPU) de Formosa, que se produjo por decisión del Gobierno nacional de no enviar los fondos comprometidos del Tesoro Nacional, a pesar que la obra ya tiene un avance del 70%. Se trata de un proyecto clave para producir dióxido de uranio (UO₂) el cual es usado en las centrales nucleares, cuyo funcionamiento estará en riesgo si no se finaliza con la planta en Formosa.
La Nueva Planta de Uranio de Dioxitek en Formosa se encuentra paralizada por decisión del Gobierno nacional que no envía los fondos del Tesoro Nacional pese a las graves consecuencias que acarrea la medida: comprometer el funcionamiento de las centrales nucleares y, con estas, que se ponga en riesgo al sistema eléctrico nacional. La noticia sobre la gravedad de esta paralización ya trascendió los límites de la provincia y distintos medios nacionales se están haciendo eco de la decisión de la gestión de Javier Milei.
“No hicieron las obras del gasoducto Néstor Kirchner, no hicieron las obras complementarias en la reversión del Gasoducto Norte, y ahora esto, parálisis total, no hacen nada”, sentenció el periodista Gustavo Sylvestre en el canal C5N luego de leer la noticia sobre la paralización de la planta en Formosa, que fue publicada en el medio NEA Hoy, contextualizando con el parate que han tenido las obras estratégicas en el país, entre las que se cuenta la de Formosa.
“La planta está todavía en Córdoba y se está trasladando a Formosa donde la quieren terminar de fabricar, pero está paralizada. Centralmente produce combustible nuclear, y sin esto las centrales nucleares de Embalse, Atucha I y Atucha II no pueden producir energía eléctrica para el consumo interno. Quedó todo paralizado porque Nación decidió no enviar los fondos y en tanto continúe así se pone en riesgo el funcionamiento de esas tres centrales nucleares que generan energía limpia y si no se las abastece significa que se va a tener que importar energía”, señalaron en la misma emisora.
Además de los televisivos, medios nacionales como El Cronista, Mendoza On Line, Página 12 se hicieron eco de la noticia, al igual que otros especializados como Mejor Energía y también radiales.
Sin la planta de Dioxitek en Formosa, que tiene un avance del 70% y donde el Estado invirtió 150 millones de dólares, no se va a asegurar el suministro continuo de combustible nuclear y no van a funcionar las centrales nucleares de Embalse, Atucha I y II.
El expresidente del directorio de Dioxitek, actual ministro de Cultura y Educación, Julio Aráoz, en comunicación con la periodista Cintia García en el programa “La García” por la Radio AM 750, explicó que se pone en riesgo el suministro de materiales claves para la generación del 7% de la energía que se produce en el país con dichas centrales.
Dio cuenta de que la paralización de la planta carece de sentido, puesto que “podría estar operando en no menos de dos años si se cumpliera con el cronograma de inversiones”, lo que muestra el alto grado de avance que tiene y destacó que se trata de “una empresa que tiene superávit”.
Ante la periodista de la señal AM 750, Aráoz recordó que “la planta ya fue paralizada durante la gestión del presidente Macri, pero en ese momento lo único que se deterioró fue el hormigón y otros elementos de la obra civil básicamente. En la actualidad la paralización pone en riesgo maquinarias especializadas importadas desde Alemania y otras inversiones en tecnología de punta que pueden ser abandonadas y desperdiciadas”. Además puntualizó que se perderán trabajos especializados.
Por otro lado, aseguró que de no concretarse la planta de Formosa la actividad de Dioxitek se frenaría totalmente, puesto que las instalaciones en la provincia iban a complementar las que están en Córdoba. “Hay un compromiso que ha asumido el Estado ante la Justicia de Córdoba, que le ha dado fecha de vencimiento para seguir operando la planta con el condicionamiento de que el proyecto en Formosa se termine”, finalizó en la entrevista, que posteriormente fue tomada por el diario Página 12.
Es importante remarcar que la planta de Formosa cuenta con tecnología de última generación, ajustada a parámetros de diseño y operaciones que están estrictamente regulados por organismos nacionales e internacionales. La planta iba a minimizar el impacto ambiental y a eliminar la necesidad de desechar líquidos, al adoptar un enfoque de vertido líquido cero. Comparada con las actuales plantas industriales en el país y la región, la NPU iba a estar a la vanguardia ofreciendo un modelo de eficiencia, seguridad y modernización.