Distintas voces del arco universitario formoseño se expresaron en contra de la ratificación del veto presidencial a la Ley de Financiamiento de las Universidades nacionales, rechazando el intento del Gobierno libertario de “desprestigiar” a las casas de estudios “sólo para justificar desfinanciarlas”. Además, criticaron el “alineamiento político” con la gestión mileísta de la actual conducción de la Universidad Nacional de Formosa (UNaF), que fue la única del país que no adhirió a las masivas manifestaciones en defensa de la educación pública y la recomposición de los salarios docentes y no docentes.
Para el decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Provincial de Laguna Blanca (UPLaB), el doctor Julián Bibolini, la convalidación de la Cámara de Diputados al veto del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario “es una noticia muy mala”.
En diálogo con la Agencia de Noticias Formosa (AGENFOR) lamentó que “se haya golpeado con dos vetos a dos poblaciones muy importantes para la Argentina, a los jubilados primero y ahora a las Universidades”. “Es terrible”, afirmó y criticó fuertemente a los legisladores que justifican el desfinanciamiento difamando a las casas de estudios.
Subrayó que “las Universidades tienen un alto prestigio para la población y la única forma que les queda para justificar desfinanciarlas es desprestigiarlas, diciendo que son corruptas o que se gastan la plata”, cuando en realidad, “han representado durante muchísimos años grandes avances, de ellas han resultado Premios Nobel y tenemos muchas dentro del ranking mundial de las mejores Universidades”.
En este punto, dilucidó que la actual gestión nacional “tiene el objetivo de desfinanciarlas para que se achiquen, quizás puedan cerrar algunas y que proliferen solamente las que acepten a las personas que puedan pagarlas”.
“Preocupa porque esto es el futuro –advirtió-. Buscan romper un equilibrio que viene desde hace muchos años, quieren ir ahogando a las Universidades paulatinamente con esta cruz del tiempo”.
En contraste, destacó el panorama que se vive en Formosa merced a las políticas del gobernador Gildo Insfrán. “Agradezco que somos una Universidad provincial, que el Gobernador nos garantiza el presupuesto a través de todos los medios necesarios, y no se pone a hacer recortes sobre la Universidad, ni mucho menos”, enfatizó.
Y además sumó que desde el Laboratorio Laformed “estamos produciendo nuevos medicamentos y se amplió la producción de otros productos, que son de mucho uso en la población”, lo cual “solamente sucede en Formosa, no hay otro lugar del país en el que pase algo así”.
“Desde el Modelo Formoseño estamos demostrando que nosotros sí queremos que nuestra población tenga al alcance los insumos necesarios, la educación, la salud, etcétera”, significó, contundente.
La UNaF, bajo el lineamiento de Milei
Desde la Agremiación de Docentes Universitarios de Formosa (ADUFOR), su secretario general, el profesor Jorge Mora, reprobó que la actual conducción de la UNaF acompañe el desfinanciamiento universitario.
Recordó que “en aquella gran marcha que hicimos en abril, en forma explícita han emitido un comunicado donde expresaban el no acompañamiento a la protesta. Ahora también pasó lo mismo con la manifestación de la semana pasada y tampoco se han expedido con relación al veto presidencial”.
“Han manifestado que reciben un dato diferenciado con relación a la gestión nacional anterior y, por lo tanto, no acompañan la protesta” ni el reclamo que viene haciendo el conjunto del sistema universitario argentino.
En la misma sintonía, pero desde la óptica del claustro estudiantil, se expresó Camila Servín, quien cursa el Profesorado de Historia en la UNaF.
“Es totalmente repudiable y te da bronca”, exclamó y condenó que en la Universidad Nacional de Formosa “todo siga como si no pasara nada, cuando en casi todo el país tenemos tomas y reclamos”.
Calificó a esta situación como “muy indignante”, marcando que se debe al “alineamiento político a Milei que está teniendo el Rectorado, como también el centro de estudiantes Línea Azul en la Facultad de Humanidades”.
“No sabemos cuál es la razón para sumarse a este ataque a la Universidad y la educación pública”, sostuvo la joven, recalcando que desde el claustro estudiantil “tenemos un montón de reclamos”, siendo uno de los más fuertes el comedor universitario, cuya apertura nunca se produjo.
“Hace más de dos años que en la UNaF tenemos el edificio del comedor estudiantil y todavía no se inaugura. En su momento, preguntamos en el centro de estudiantes por qué no lo abrían y nos respondieron que era un tema de presupuesto, que había que buscar nutricionistas y cocineros, como si no tuviésemos licenciados en Nutrición recibidos en la propia institución”, explicó, rechazando tal justificación.
Alertó que “esto es un golpe más a miles de estudiantes, sobre todo del interior que tienen una situación más difícil todavía, porque les cuesta pagarse la comida, el alojamiento y los estudios”.
Y aclaró que “si bien tenemos una Universidad pública gratuita, no todo es gratis”, mencionando a modo de ejemplo que “un dossier para una cátedra sale $10 mil y por la complejidad horaria que ponen, te dan una clase a las siete de la mañana, otra a las dos de la tarde y otra a las ocho de la noche”, con lo cual los alumnos transcurren casi todo el día en el campus y deben costearse los alimentos durante toda la jornada.
De manera que “se vive una situación difícil en la UNaF y esto también es un ejemplo claro de cuál es la política de Milei, no es solamente la política anti-educativa, sino un plan de guerra a cualquier oportunidad de poder construir y avanzar como país”, culminó.