En la vereda del Museo “Juan Pablo Duffard”, en la ciudad capital, la Dirección de Patrimonio Sociocultural ofreció este martes 1° de octubre “jopara” a los transeúntes, un plato elaborado con maíz y poroto que se sirve el primer día de este mes, siguiendo una tradición que consiste en espantar al “Karaí Octubre”, o “Señor de Octubre”, a quien se le atribuyen las carencias del mes, en la mitología guaranítica.
La actividad comenzó a las 10 y además hubo danzas folklóricas y recitados a cargo del profesor Mario Jazmín, músico, poeta y narrador.
Allí, la directora de Patrimonio Sociocultural, Graciela Buiatti, señaló a la Agencia de Noticias Formosa (AGENFOR) que la costumbre está arraigada al patrimonio cultural de los formoseños.
“Esperamos que coman el ‘jopara’, que significa que lo que resta del año vamos a tener abundancia, y ese es nuestro propósito”, graficó.
La leyenda que rodea esta costumbre habla del “Karaí Octubre”, una figura mítica que recorre las casas de los desprevenidos, castigando con la escasez a quienes no han preparado “jopará”. Por ello, las familias y comunidades se esmeran en compartir este plato: un gesto que simboliza la solidaridad y el deseo de buena fortuna para el ciclo agrícola que inicia.
“El mes de octubre es el considerado más pobre, porque no hay nada, la cosecha está pobre, los animales flacos, no hay lluvia. El ‘Karaí Octubre’ es un mito rural, que después pasó a la ciudad. Entonces sobrevivía el trabajador y ahorrativo. Se dice que llegaba un duende, bajito, chiquito, con una espiga en la mano, el premio al trabajo y al ahorro, y un chicote, que era el símbolo del castigo al ocio, la haraganería y el despilfarro”, narró Jazmín.
Aquel “duende supervisor” comprobaba si se trataba de trabajadores, si en su paso por la casa encontraba una olla de “jopara”; un puchero con locro, porotos, arroz y verduras en abundancia.
Explicó el escritor que la región guaranítica, conformada por Paraguay y todo el norte argentino, es rica en mitos y leyendas, que siguen arraigados en la creencia de la gente, y celebró que Formosa continúe con estas costumbres.