En el marco de la pandemia del COVID-19 y un duelo nacional de cinco días por los fallecidos a causa del virus, este viernes 16 de julio, feriado en el territorio provincial, se conmemora el Día de la Virgen del Carmen, madre y patrona de Formosa.
“A la Virgen María, con sus distintos nombres, la recordamos sobre todo por ese ‘sí’ que le ha dado a Dios para que Él conduzca su vida”, afirmó el padre Raúl Méndez.
Indicó que “la mejor forma de servir y festejar es pensar en lo que María nos da. Creo que la mejor forma de celebrarla es desde nuestro servicio cotidiano”.
A modo de ejemplo, mencionó el trabajo de los médicos, enfermeros y el personal de salud en el marco de la pandemia, al igual que la labor de los demás trabajadores esenciales, como las fuerzas de seguridad, los empleados de la cadena alimentaria y el comercio, los periodistas, etcétera.
“Creo que la fiesta es hacer lo que haría nuestra madre: poder servir –reflexionó-. Nosotros vamos junto a María a presentarle nuestra realidad, lo que nos duele, lo que toca nuestro corazón. Aunque muchas veces nos sintamos impotentes y decimos ¿cómo? Y le pedimos que nos ayude a salir”.
Ante el dolor que atraviesan las personas por la pérdida de un ser querido o bien del trabajo, “uno quiere ir al encuentro de nuestra madre y decirle que esto nos está pasando”.
“Hoy quiero transmitir eso y pedir para que juntos podamos superar esto”, finalizó.