En el hospital de Alta Complejidad se logró la procuración de órganos que se destinaron a salvar la vida de pacientes pediátricos.
Desde el Ministerio de Desarrollo Humano se dio a conocer que un nuevo operativo de ablación de órganos tuvo lugar en la provincia. Fue el tercero que se pudo realizar después de la marcada y sostenida disminución de casos COVID.
En esta oportunidad, fue efectuado a un menor de edad y permitió la procuración de los riñones, el corazón y el hígado, que fueron destinados a salvar la vida de pacientes pediátricos, de distintos lugares del país, que padecían graves enfermedades.
Los procedimientos de ablación se llevaron a cabo en el hospital de Alta Complejidad “Pte. Juan Domingo Perón”, en coordinación con el CUCAIFOR y el INCUCAI, sumado al trabajo mancomunado de diferentes equipos médicos y de otros profesionales, que requieren este tipo de intervenciones.
Respecto a ello, desde el CUCAIFOR, informaron que esta semana “tuvimos nuevamente la posibilidad de tener un donante de órganos, gracias a la decisión de una familia que, a pesar del dolor de la pérdida de un ser querido, magnificada por supuesto por tratarse de un niño, comprendió que la vida puede continuar, dándoles una oportunidad a otros niños para que puedan seguir viviendo”.
La ablación del corazón fue concretada por “el equipo de cirugía cardiovascular pediátrica del hospital de Alta Complejidad” y aclararon que, de éste órgano, “fue implantada la parte valvular”. Es decir, que si bien “no es exactamente un trasplante cardíaco, porque en ese momento lamentablemente no había un donante compatible para la recepción del corazón, igualmente, se pudo lograr la ablación para el reemplazo de válvulas cardíacas”.
Este procedimiento de ablación de válvulas cardíacas pediátricas es la primera vez que se realiza en la provincia de Formosa, por lo que fue reconocida y destacada por el INCUCAI.
En tanto, la ablación hepática estuvo a cargo de un equipo de salud proveniente del hospital Garrahan. Mientras que la ablación de los riñones fue hecha por el equipo de ablación del CUCAIFOR.
Decisión de vida a pesar del dolor
En relación al complejo proceso, describieron que, en primer lugar, se hizo la contención de la familia, mediante un equipo multidisciplinario, encabezado por el equipo tratante del paciente. “En este caso, el servicio de terapia intensiva pediátrica, junto con el servicio de calidad de vida y el acompañamiento de los profesionales y especialistas del área de procuración de órganos”.
Luego de la entrevista y la aceptación de la familia de la donación, se puso en conocimiento al INCUCAI que, según los criterios estandarizados de orden de gravedad, de antigüedad en lista de espera y de otros factores vinculados a cuestiones biológicas, “determinó quienes eran las personas que reunían las condiciones para poder recibir los órganos ablacionados”.
Seguidamente, como es habitual, “se corroboró que los pacientes receptores estén en condiciones y se hizo el contacto con los equipos que iban a llevar adelante los trasplantes, para que vengan a realizar la cirugía de ablación. Todo se hace a través de un sistema informatizado”.
Fue un proceso que duró casi 24 horas, en el que intervinieron muchos profesionales. “Los de las áreas ya mencionadas, más los sectores de neurología, soporte de laboratorio, diagnóstico, quirófano y las áreas administrativas y legales, que también trabajaron arduamente para que todo se haga bajo las normas que establece la ley, en situación del fallecimiento de una persona”.
Más adelante hizo notar que, si bien los profesionales del Hospital de Alta Complejidad tienen ya varios años de experiencia en ablación y trasplantes, hay que tener en cuenta que cada procedimiento es diferente e implica desafíos distintos, que “nos pone en situaciones que debemos ir sorteando sobre la marcha”.
En este caso en particular, lo primero fue contener y acompañar a la familia. Lo segundo, la parte legal “en la que tenemos que ir contra reloj. Muchas veces los caminos legales no tienen la misma velocidad que los caminos de la medicina”.
Sin embargo, distinguió que gracias al trabajo conjunto, “porque todos se ponen a disposición frente a una situación especial como esta”, se pudo trabajar rápido, sortear las dificultades y resolver los requerimientos legales y médicos. Además, de permitir la coordinación tanto de acá, como de la sede central del INCUCAI y con los equipos que están en todo el país, para que todo se pueda organizar y hacer en un tiempo récord.
“Es un gran desafío, pero a la vez un gran trabajo que requiere del compromiso y el esfuerzo de todos. En esto es primordial agradecer el apoyo del Gobierno de la Provincia y de las autoridades del Ministerio de Desarrollo Humano, que hacen posible que podamos lograr este trabajo y nos allanan el camino para poder hacerlo”, pusieron de relieve en el cierre.