Desde la cartera de salud recuerdan que es importante acudir al centro de salud u hospital más cercano en caso de tener síntomas de la enfermedad.
Este Viernes Santo, fecha cara en los sentimientos de todos los cristianos, las medidas tendientes a prevenir la proliferación de mosquitos, especialmente del aedes aegypty continuarán en Ingeniero Juárez, de acuerdo a lo que se dispuso desde el Ministerio de Desarrollo Humano de la provincia.
A su vez, además de las fumigaciones y entrega de repelentes, se informará a la población acerca de los síntomas a tener en cuenta en caso de sospecha de haber contraído el dengue o zika.
Los síntomas se inician después de un período de incubación que puede variar de cinco a ocho días tras la picadura del mosquito. Habitualmente cursa con fiebre alta que se inicia de forma repentina y se acompaña de dolor de cabeza intenso, dolor alrededor de los ojos y detrás de los globos oculares, cansancio y dolor en músculos y articulaciones.
Al tercer día de la fiebre, muchas veces aparece un exantema por el cuerpo, es decir, una erupción generalizada de color rojizo, que dura unos dos o tres días. También puede haber náuseas, vómitos, pérdida del apetito o dolor de garganta. La fiebre usualmente dura hasta una semana y suele ser intermitente. Una fiebre que dura más de 10 días no suele ser por dengue. En ocasiones, al disminuir la fiebre, aparece un segundo exantema cutáneo que dura entre uno y cinco días y desaparece con descamación de la piel. Tras la desaparición de los síntomas puede persistir el cansancio, a veces junto con depresión, durante muchas semanas.
Algunas personas después de la fiebre inicial pueden tener síntomas más graves característicos del dengue hemorrágico, llamado así por las manifestaciones hemorrágicas que tienen los pacientes. Pueden tener sangrado por la encías, hemorragias por el tubo digestivo o sangrado por la orina. Son características la aparición de petequias o púrpura, que son erupciones en la piel como puntitos rojos o placas rojizas causadas por un aumento de la permeabilidad de los capilares, produciéndose la salida de glóbulos rojos a través de la pared de los mismos. Cursa con dolor abdominal, vómitos persistentes y respiración acelerada. Sin tratamiento, evoluciona a shock con disminución de la presión arterial y en ocasiones la muerte.
En general, el dengue es una enfermedad autolimitada con una mortalidad menor del 1%. El dengue hemorrágico tiene una mortalidad con tratamiento del 2-5%, pero sin tratamiento puede ser mortal hasta en el 50% de los casos.