Tanto de productos destinados a la compaña contra el dengue, como de los llamados genéricos
Respecto a una información publicada en medios locales, acerca de la producción de medicamentos y otros insumos sanitarios, que lleva adelante el Laboratorio de Especialidades Médicas de Formosa –LAFORMED-, desde el Ministerio de Desarrollo Humano, precisaron datos sobre la continuidad que mantiene la planta, en cuanto a la elaboración de dichos productos.
El laboratorio, se encuentra ubicado en el Parque Industrial, en la ciudad de Formosa. Allí, se elaboran y producen los insumos que son utilizados en la campaña contra el dengue, tales como: larvicidas biológicos, repelentes de uso personal e insecticida ambiental.
El director de la institución, doctor Rodrigo Gómez, señaló que la producción actual “por mes” de dichos productos, es de alrededor de “30.000 unidades de repelente de uso personal, 10.000 unidades de larvicida biológico y 2.000 litros de insecticida ambiental”, indicando que, para ello, se tiene siempre en cuenta “la planificación de distribución que hacen las brigadas sanitarias en los distintos barrios de la ciudad”.
Asimismo, comentó que, en el área de producción de genéricos, el laboratorio sigue con la producción de pasta dental, alimentación parenteral, alcohol en gel, morfina en gotas al 2%, preparaciones magistrales, cremas varias y jarabes. “Y se están elaborando también anteojos recetados, destinados a los Operativos “Por Nuestra Gente Todo” y a los beneficiarios del Programa “Incluir Salud”.
En relación a lo anterior, mencionó que, los productos son elaborados en la Planta de Producción, denominada “Biotec” donde se desarrollan y producen los llamados productos “domisanitarios”.
Esto se lleva a cabo a partir de la selección de materias primas que se someten a la línea de producción para luego ser envasados y empaquetados. Durante todo ese proceso de producción se realizan “controles de calidad”, ya sea de las materias primas, durante el proceso de producción y al producto final.
El funcionario comentó, además, que LAFORMED cuenta con un convenio de trabajo con el laboratorio de análisis de medicamentos de la Universidad Nacional del Litoral de la provincia de Santa Fe, que en algunos casos “realizan ensayos o controles a los productos o a sus respectivas materias primas”.
Y agregó que, la planta cuenta internamente con un área denominada “Garantía de Calidad”, que asegura que se cumplan todas las normas vigentes y las buenas prácticas de fabricación, según el sistema de gestión adecuado, donde se establecen los procedimientos “mediante los cuales se ejecutan los procesos productivos de control de calidad y distribución”.
Dengue
Acerca del tema, el responsable del Departamento de Vectores y Zoonosis de la cartera de salud provincial, veterinario Alejandro Romero, afirmó que el laboratorio Laformed “nos provee de larvicidas, repelentes e insecticidas”, aclarando que el uso de los mismos “depende de la situación epidemiológica y de los ejes que se llevan adelante en la campaña contra el dengue”.
Particularizó que en la temporada de “otoño e invierno”, la tarea que se realiza es “concientizar a la población y educar con respecto a la importancia de eliminar los recipientes no útiles”, es decir que el haciendo hincapié “está puesto en el descacharrizado”.
Para eso, se trabaja de manera articulada con vialidad provincial “que colabora con los camiones y con la municipalidad que hace la recolección de neumáticos que ya no se usan de las gomerías”.
Añadió que, en el marco de la campaña, se difunde a la comunidad que los elementos que no pueden ser eliminados (descacharrizados) o neutralizados (tapados herméticamente, colocados boca abajo o bajo techo) para evitar que ingresen en estos los mosquitos, deben ser tratados con larvicida.
Y avanzó explicando que, para el uso del larvicida, por medio de las visitas casa por casa, de los brigadistas sanitarios “proveemos a los vecinos de este líquido que es el larvicida Bacivec, que se presenta en frascos goteros, y se le enseña cómo, cuándo, dónde y cada cuanto, debe ser utilizado. A la vez, se le deja un folleto con las instrucciones para el uso del producto”.
De igual modo, en el caso de requerirse algún bloqueo “incluso en esta temporada”, son concretadas las acciones de control focal, descacharrizado, fumigación y entrega de repelentes “al paciente”, porque este producto “está destinado a evitar que el paciente con sospecha de dengue sea picado por mosquitos y que él o ella, puedan transmitir la enfermedad a otras personas sanas”.
Especificó que, con el descacharrizado, se apunta fundamentalmente a controlar la fase de huevo del mosquito “porque tienen una superviviencia de más de un año, lo que significa que cuando lleguen las lluvias, ese ciclo del huevo, que se encuentra atenuado, se reactiva nuevamente”.
Sin embago, con la aplicación del larvicida “se apunta a controlar la fase de larva del mosquito” inclusive, cuando hay huevos que quedan adheridos a las paredes, por ejemplo, de los tanques que cuando entran en contacto con el agua, evolucionan a la fase de larva. “Al nacer se alimentan del larvicida y mueren”, describió.
Aseveró en tanto que, en periodos de temperaturas más elevadas y aumento de lluvias “se intensifican las acciones”. Por ejemplo, en el caso de los bloqueos “se hace la fumigación de las viviendas y de las demás de la manzana que la rodean, dentro de un radio de 9 manzanas”.
En dicho periodo, se suman actividades de control focal y de ser necesario, se complementa con la fumigación espacial, que es la que se hace en las calles, espacios públicos, lugares recreativos y de esparcimiento, entre otros; lo cual se efectúa con máquinas pesadas transportadas en vehículos.
Mientras que cuando se presentan brotes, la indicación específica “es la fumigación espacial con el insecticida provisto por el laboratorio LAFORMED” a fin controlar a los mosquitos adultos que pueden estar cargados de virus y transimitir la enfermedad”.
Al final, Romero puso de relieve que, cada actividad que se lleva adelante en el marco de la campaña contra el dengue “tiene su fundamento” porque están orientadas a la prevención de la enfermedad y al control del mosquito Aedes aegypti, vector que transmite el dengue. Y en el caso de la fumigación espacial, se aplica cuando hay muchas manzanas a trabajarse “porque es la fumigación que tiene un mayor radio de alcance”.