En nuestra ciudad se acaba de renovar la ya tradicional evocación anual de la independencia del Paraguay, en este caso los 206 años de su emancipación que alcanzó tras la Revolución de Mayo de 1811. Y fue la Escuela Normal “República del Paraguay” la que albergo el acto encabezado por el ministro de Cultura y Educación, Alberto Zorrilla junto a la cónsul del vecino país en esta ciudad, Haydee Dienstmaier de Pérez, además de legisladores provinciales y directivos de Casa Paraguaya, además de la comunidad educativa.
Al reflexionar acerca de la fecha, el ministro Zorrilla expuso que los formoseños “somos bilingües, y lo aceptamos con orgullo y alegría”, subrayando que “festejar la independencia del Paraguay es festejarnos a nosotros mismos como latinoamericanos, celebrar la libertad de todos los pueblos de este continente que aprendió sobre la sangre de sus mártires que tenemos que vivir en paz”.
Expuso el sentir “orgulloso de ser parte de la gran nación guaranitica de esta parte de Latinoamérica, contribuyendo a la cultura guaraní desde nuestros propios rasgos culturales”, para señalar que Formosa tiene la particularidad de decir en su constitución que somos pluriculturales, y nuestra identidad se construye desde las diversas raigambres culturales que enriquecen y formaron nuestro pueblo”
Refirió a que “en esta parte del territorio la influencia guaranitica es manifiesta, como en el oeste la salteña-santiagueña y la de nuestros pueblos originarios, enriqueciendo aun mas esta conjunción”.
Para Zorrilla “de las libertades de los hermanos también aprendemos”, advirtiendo que “la libertad paraguaya estuvo condicionada, como lo estuvo la argentina, por los imperios: El español primero”. Amplio rememorando que “la unidad latinoamericana siempre estuvo bombardeada por los imperios, la que se tradujo en la trágica década de 1865 en adelante, donde nos matamos encarnizadamente entre nosotros. Y fue por acción de los imperios, en aquel caso el británico que entonces manejaba las finanzas del mundo, avalado por nuestros representantes de la oligarquía latinoamericana”.
“Cuando el pueblo no quería someterse a esa dependencia imperial, entonces se lo liquidaba, que fue lo que ocurrió”, evoco acerca de sucesos de entonces.
Por otra parte, destaco que “Manuel Belgrano tuvo un papel importante de intercambio con los militares paraguayos en Tacuari y Paraguari, y en esos meses que estuvieron acantonados uno frente al otro, seguro los centinelas aflojaban y los generales se reunían para hablar e intercambiar”.
Recordó que “cuando Paraguay logra su independencia, el primer tratado con lo que entonces era nuestro país, las Provincias Unidas del rio de la Plata, Gaspar Rodríguez de Francia pidió que el representante argentino fuera
Belgrano”, señalando que “era el único en quien confiaba”.
Expuso finalmente que “otra gran figura paraguaya, reconocida incluso por el Papa Francisco, fue la mujer guaraní, a quien su santidad la ubico en un sitial de preponderancia. Por eso festejar la libertad del Paraguay es festejar a la madre paraguaya, es celebrar la vida y el honor”