A través de una charla que fue organizada por los Programas Provinciales: de Prevención y Control de la Diabetes y de Nutrición, se busco generar conciencia sobre estas patologías. Para la ocasión contó también con la colaboración de los Programas Provinciales de Hábitos Saludables en Nutrición y de Actividad Física, dependientes del ministerio de Desarrollo Humano de Formosa.
De la misma participaron los estudiantes del nivel superior del Profesorado de Educación Física de la localidad de Ibarreta. A partir de ella, se difundieron múltiples hábitos saludables tendientes a promover “cuidados sencillos que debemos hacer cada uno con la propia saluda” para prevenir la diabetes.
En este marco, profesionales de los programas, recordaron que la diabetes es una enfermedad que “puede evitarse a través de la práctica diaria de hábitos sanos” como la buena alimentación y el ejercicio físico “para que el cuerpo adquiera los nutrientes que se necesitan para desempeñarse con la correcta energía a lo largo del día y para dejar el sedentarismo que contribuye a acumular grasas y es tan perjudicial a la salud en general”.
Seguidamente agregaron además que “mantener hábitos saludables “no sólo ayudan a prevenir la diabetes, sino que evitan la aparición de otras enfermedades, que son consecuencia de los malos hábitos como: hipertensión, sobrepeso, obesidad y numerosas patologías cardiovasculares”, que pueden evolucionar con el tiempo en otras que “a su vez pueden resultar aún más graves”.
Entre esas malas costumbres dañinas puntualizaron “el consumo de alimentos con grasas saturadas: embutidos, fiambres, frituras, snacks; que entre otras cosas tienen un alto nivel de sodio “sustancia que aumenta la tensión arterial”. Asimismo la ingesta de gaseosas y bebidas azucaradas, y el humo del tabaco. “Está demostrado científicamente que fumar es una práctica nociva que amplía las posibilidades de potenciar los factores de riesgo, por lo tanto debemos evitarlo”.
A la vez que subrayaron la necesidad de alimentarse cada día equilibradamente y haciendo las cuatro comidas “sin saltear ninguna y repartiendo entre ellas, a lo largo del día todos los grupos de alimentos, siempre acompañados en una mayor porción de frutas y verduras, que son los más ricos en nutrientes esenciales para el cuerpo”.
Acerca de la práctica de actividad física instaron a los presentes a sobre poner el cuerpo en movimiento diariamente, con un ejercicio físico que puede ser de suave a moderado “es decir que no es necesario realizar un actividad intensiva, un ejercicio leve: caminata, andar en bicicleta, bailar o trotar aporta sus grandes beneficios.
Entre ellos destacaron que poner el cuerpo en movimiento todas las veces posibles en el día y “hacer un ejercicio regular que dure al menos 30 minutos ininterrumpidos, aunque fuera suave: mejora la circulación de la sangre y el oxígeno, favorece la eliminación de sustancias tóxicas, reduce los niveles de colesterol, previene enfermedades musculoarticulares y hasta mejora el humor de las personas”.
Al cerrar las exposiciones, el equipo solicitó a los estudiantes a replicar la información recibida a los familiares, amigos y círculos cercanos “concientizando también ustedes y promoviendo estas prácticas en toda la comunidad” para que entre todos “podamos tener una mejor calidad de vida”. Y en el caso de las personas con diabetes “comprendan la necesidad de ir cambiando los hábitos para controlar su enfermedad y disfrutar de un buen estado de salud”.