El Senado de la Nación aprobó y convirtió en ley el proyecto de Promoción a la Producción y Elaboración de Productos Orgánicos, de autoría del diputado nacional Ramiro Fernández Patri, que busca dar estabilidad y previsibilidad al sector por un plazo de 10 años, y que contempla diversos beneficios fiscales para emprendimientos de empresas pequeñas y medianas.
El Senado de la Nación aprobó, en la noche del jueves 28, casi por unanimidad, con 54 votos a favor y uno en contra, este proyecto que ya contaba con media sanción desde julio en la Cámara Baja y propone la creación de un régimen de promoción a la producción y elaboración de productos orgánicos por un plazo de diez años, con beneficios impositivos y un certificado de crédito fiscal, entre otros puntos.
A partir de la aprobación de esta ley, los productores de productos orgánicos van a tener un fondo de 100 millones de pesos para poder promocionar e incentivar la certificación y todo el trazado de la producción orgánica en la Argentina.
En ese sentido, el diputado Fernández Patri, autor de la ley y presidente de la Comisión de Economías Regionales y Desarrollo de la HCDN, afirmó que “este fondo servirá para generar campañas de concientización, para que hagamos una alimentación mucho más saludable, para que demos empleos a muchas economías regionales que lo necesitan y para que contribuyamos con esos productores que están posicionando nuestras producciones en el mundo”.
Hoy en día, el 98% de lo certificado por Senasa se exporta (alrededor de 118.685 toneladas) siendo los principales destinos de los productos orgánicos las exportaciones a Estados Unidos (43%) y la Unión Europea (38%). Por eso, Fernández Patri sostuvo la importancia estratégica de la producción orgánica, siendo un sistema productivo que genera valor agregado y divisas a la macroeconomía argentina.
“Esta ley va a permitir muchos beneficios, desde cuidar nuestros recursos naturales, como el suelo, la tierra, hasta generar arraigo en nuestros productores y generar divisas para el desarrollo de nuestra región y de nuestro país, porque la gran mayoría de la producción orgánica se exporta”.
Y manifestó que el proyecto prevé un aumento del 50% en superficie certificada, cosechada y volumen exportado con mayor valor agregado. “Con lo cual la inversión que el Estado realiza con este proyecto se estima que se multiplicará por 10 en generación de divisas, puestos de trabajo y trabajo más calificado para el desarrollo de las economías regionales”, destacó.
En esa línea, agregó que “las provincias están haciendo esfuerzos hace varios años y este fondo va a permitir que la Nación contribuya a esos esfuerzos”.
“En el caso de nuestra provincia, el gobernador Gildo Insfrán, ha decidido la puesta en marcha de una fábrica de bioinsumos en el Polo Científico y Tecnológico de Formosa, que va a permitir que desde el Estado provincial, se puedan producir los bioinsumos naturales para asistir a los pequeños productores agropecuarios de la provincia de Formosa y de esa manera puedan producir de forma orgánica”, remarcó Fernández Patri.
Por eso, esta iniciativa significa “trabajo de calidad para jóvenes y mujeres, así como también, significa poder posicionar a nuestras economías regionales en la Argentina: el arroz, la yerba mate, los arándanos, las peras, las manzanas, el azúcar, los vinos y tantos otros productos que trabajamos en nuestro país”, indicó.
Asimismo, establece que los productores que acrediten al menos un año en la generación de productos primarios para su consumo en fresco en el marco de la ley 25217, tendrán una reducción del 50% del Impuesto a las Ganancias en cada ejercicio fiscal. Y un Plan de refinanciación de deudas a cargo de las provincias, municipios o comunas, para Obras Hidráulicas de Saneamiento (Enhosa) otorgados con programas de financiamiento de organismos multilaterales.
En cuanto a Formosa, el legislador también destacó que en el año 2022 la provincia contó con un total de 370 hectáreas bajo seguimiento orgánico y se cosecharon un total de 175 hectáreas de “otros” cultivos (principalmente quebracho) y 14 hectáreas de cultivos industriales (aloe vera).
Y marcó que este año, se realizaron cursos de formación de Implementadores de la Normativa Orgánica a partir de un trabajo en conjunto con el Ministerio de la Producción y Ambiente y la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, además de la participación de organismos vinculados al sector agroalimentario como el CEDEVA, el PAIPPA y el INTA, cuyo objetivo fue el de formar los Recursos Humanos y técnicos necesarios para iniciar procesos de certificación sobre la apicultura formoseña.
“La apicultura en Formosa es una de las producciones con mayor potencial y oportunidades de avance en la cadena de agregación de valor y de aplicación de herramientas de diferenciación para el acceso a mercados internacionales”, resaltó y subrayó que “las frutas tropicales, los cítricos y las cucurbitáceas, también presentan importantes perspectivas de posicionarse”.
“Formosa en sí, por su política de conservación de los montes nativos y de un modelo de producción con productores, está llamada a cumplir un rol protagónico en la Producción Orgánica”, aseguró.
Al tiempo, señaló que “las economías regionales representan el 50% del total de puestos de trabajo en el sector agroindustrial”, así como también, “dan empleo a 1,27 millones de personas en todo el país, principalmente a través de PyMEs que se destacan por su capacidad de agregar valor a la producción primaria” y por último, “estimulan el arraigo, el dinamismo productivo y las exportaciones”.
La Producción Orgánica en Argentina está amparada por la Ley 25.127 del año 1999. Se basa en el uso mínimo de insumos externos, sin uso de fertilizantes y plaguicidas sintéticos, ni manipulación genética. Se utilizan métodos que minimizan la contaminación del aire, suelo y agua. Así, los productores, manipuladores, procesadores y comerciantes de alimentos orgánicos se rigen por normas que mantienen la integridad del sistema.
Lo que establece la ley
Crea un régimen de promoción de la producción y elaboración de productos orgánicos certificados y autorizados por un plazo de 10 años.
Faculta a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) a crear un certificado promocional a los efectos de la operatividad del presente régimen.
Otorga beneficios para convertir en bonos de crédito fiscal el 50% de la totalidad de las contribuciones patronales sobre la nómina salarial de mano de obra empleada en la producción y/o elaboración de productos orgánicos. Podrán utilizarlos para la cancelación de tributos nacionales, y sus anticipos, como así también los tributos aduaneros, excluido el impuesto a las ganancias.
Una reducción del 50% en el monto total del Impuesto a las Ganancias determinado en cada ejercicio respecto de las actividades productivas y/o de elaboración abarcada por esta ley.
Crea el “Registro de Productores/ras y Elaboradores/ras de Productos Ecológicos, Biológicos u Orgánicos”, en el ámbito de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca.
Crea el Fondo de Promoción del Producto Orgánico, el cual será integrado por recursos que anualmente se asignen a través de la ley de presupuesto, ingresos por legados o donaciones y/o fondos provistos por organismos internacionales u organizaciones no gubernamentales.
Invita a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a que adhieran a la presente normativa, previendo estructuras administrativas para fortalecer ámbitos de trabajo y/o entablar nuevas alianzas entre Gobiernos, el sector privado y la sociedad.