El ministerio de Desarrollo Humano provincial recuerda a la comunidad que el dengue, zika y la fiebre chikungunya son enfermedades virales transmitidas desde una persona infectada a otra por medio de la picadura del mosquito Aedes aegypti.
El contagio se produce por la picadura de los mosquitos infectados, de aquí la importancia de evitar los criaderos de mosquitos en nuestros hogares, patios y alrededores. Cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona enferma luego pica a otras personas les transmite la enfermedad.
Hasta el momento, en la Argentina, no se cuentan con vacunas de prevención, por lo cual la mejor manera de evitarlas es trabajar entre todos los sectores de la sociedad para evitar criaderos de mosquitos.
Los barrios alcanzados este lunes por los trabajos integrales son: El Porvenir, Luján, Namqom, San Isidro, Balbín, 1 de Mayo, Juan Domingo Perón, Municipal, La Esperanza, 7 de Mayo, Urbanización Maradona, República Argentina, El Palomar, Estela Maris, Las Orquídeas, Los Inmigrantes, Simón Bolívar, 8 de Octubre, Mbigua, El Quebranto, 20 de Julio, 6 de Enero, El Quebranto, Antenor Gauna.
Es importante tener en cuenta que la fumigación y el rociado de insecticidas es una buena medida pero no es suficiente para eliminar el mosquito, ya que sólo lo elimina en su estado adulto, mientras que las larvas continúan desarrollándose. Por eso, para evitar la proliferación de la especie Aedes aegypti es fundamental eliminar todos los recipientes que acumulan agua limpia en las casas y en los lugares públicos.
Muchos de los recipientes donde el mosquito se cría no son de utilidad (latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico y lona, bidones cortados) y deben ser eliminados. Si los recipientes no pueden eliminarse porque se usan diariamente, igualmente debe evitarse que acumulen agua, dándolos vuelta (baldes, palanganas, tambores) o vaciándolos (portamacetas, bebederos).
Los cuidados personales son igualmente necesarios para prevenir la picadura del mosquito. Los más necesarios son: colocar mosquiteros en las ventanas y puertas de las viviendas, usar repelentes sobre la piel expuesta y sobre la ropa con aplicaciones cada tres horas, usar mangas largas y pantalones largos si se hacen actividades al aire libre y utilizar espirales, tabletas, spray o aerosoles para ahuyentar insectos en los domicilios.