La provincia aguarda que el gobierno nacional llame a licitación pública internacional para la construcción del acueducto de 500 kilómetros entre el Rio Paraguay y la localidad de Ingeniero Juárez de modo tal que sea posible avanzar en la ejecución del estratégico emprendimiento ya que existen interesados en financiar el emprendimiento.
Así lo expreso el propio gobernador Gildo Insfran a quien le llama la atención que no se haya cumplido con ese compromiso acordado en ocasión de discutirse las obras que Formosa consideraba prioritarias con el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, con quien en el marco de un dialogo político se decidió la incorporación del acueducto en el presupuesto nacional 2017.
Ya en anteriores ocasiones el gobernador había hecho públicas sus quejas porque no se había cumplido el acuerdo con Formosa para incluir la búsqueda de financiamiento de la denominada “obra del siglo” en la agenda del presidente Mauricio Macri en su viaje a China.
Hace pocos días estuvo aquí el embajador del país asiático con quien de converso sobre la obra y la existencia de empresas chinas en financiar este proyecto considerado estratégico para el gobierno formoseño por sus implicancias económicas y sociales.
Valioso componente
Además del abastecimiento de agua dulce a numerosos pueblos del interior, como componente importante del proyecto de construcción del Acueducto del Desarrollo Formoseño que se prevé ejecutar entre el Rio Paraguay e Ingeniero Juárez, el ministro de Economía, doctor Jorge Oscar Ibáñez, destaco el impulso que se prevé para la recreación de polos productivos entre los que figura la instalación de una planta de bioetanol a partir de la siembra de caña de azúcar.
Destaco el crecimiento que viene registrando dicha actividad productiva en el país puesto que ya alcanza el 12 por ciento de corte, es decir el porcentaje de bioetanol posible de ser mezclado con los combustibles convencionales.
Ibáñez no duda que , en consecuencia, se está en un escenario prometedor para la producción de caña de azúcar, señalando que los estudios realizados oportunamente prevén el cultivo de unas 20 mil hectáreas de producción bajo riego gracias al acueducto, con 2 millones de toneladas de caña de azúcar y 170 millones de litros de etanol por año, lo que significaría el 40 % de la producción total del país.
Esta referencia del ministro busca clarificar acerca de la magnitud de este emprendimiento que se inscribe en el Modelo Formoseño para el Desarrollo Provincial, sobre todo porque cuando en 2015 se lanzó el proyecto hubo quienes desmerecieron su relevancia y la limitaron a una extensa red de cañerías destinada solamente a llevar agua de un punto a otro del territorio.
“Esta monumental obra-indica Ibáñez- genera las condiciones necesarias de infraestructura para asegurar agua potable a muchas localidades y a decenas de miles de comprovincianos por un lado, pero al mismo tiempo desarrolla importantes polos productivos en diversas regiones de la provincia”.
Mirada estratégica
“Cuando se habla entonces de la “Obra del Siglo” para Formosa, se está hablando de muchísimo más que de un “caño de agua”, estamos hablando de la política pública que es capaz de interrelacionar, gracias al Plan de Ordenamiento Territorial, las diferentes obras de infraestructura realizadas hasta ahora y las proyectadas, con las características del sistema hídrico provincial y el sistema productivo y de inversiones para Formosa”, preciso.
Ratifica Jorge Ibañez que el proyecto del Acueducto del Desarrollo Formoseño “es la mirada estratégica de un gobierno que se consolida en políticas de estado que promueven seriamente el desarrollo y la calidad de vida de los formoseños, vivan donde vivan y voten a quien voten. En otras palabras eso se llama generar inclusión con justicia social tal como se hacía, en otro momento de la Argentina, que a través de Planes Quinquenales se trazaban las líneas directrices para generar desarrollo inclusivo para las grandes mayorías y no solo para los grupos concentrados de la economía”.