En todo el territorio de la provincia, la vacunación tiene lugar en los centros de salud, hospitales y vacunatorios. Además, los vacunadores siguen recorriendo los barrios, casa por casa. Y en la Capital, los vecinos pueden recibir las dosis en las carpas habilitadas en distintos puntos.
El Gobierno de Formosa, a través del Ministerio de Desarrollo Humano y sus distintos efectores, tanto de la Capital como en el interior, continúa implementando diferentes estrategias de vacunación, a fin de facilitar a los formoseños y formoseñas, la aplicación de los refuerzos de las vacunas COVID-19.
Ese accionar es llevado a lo largo y ancho del territorio, con el objetivo de fortalecer la inmunidad contra esa enfermedad, que sigue circulando en la comunidad y se mantiene vigente.
El jefe del Departamento de Inmunizaciones de la cartera de Salud provincial, el licenciado Julio Arroyo, comentó al respecto que “durante todo el mes de marzo” las distintas estrategias de vacunación contra el COVID-19 que se vienen efectuando “se mantendrán activas”.
Precisó que, por un lado, “los refuerzos están disponibles en los 30 vacunatorios distribuidos en los efectores sanitarios de la capital y en todos los que están también en los centros de salud y hospitales del interior”.
Por otro parte, cada efector, organiza operativos de recorridas por los barrios, de la ciudad capital y de las localidades, mediante los cuales, los vacunadores llegan a las casas para constatar que tanto, niños como adultos, tengan las dosis correspondientes al día.
Destacó, asimismo, que en la Capital “continúan instaladas las carpas de vacunación en diferentes lugares, con el propósito de que los vecinos que estén cerca puedan aprovechar y acercarse a recibir sus refuerzos”.
Recordó que dichas carpas, están ubicadas en la Plaza San Martín (Fontana y Avenida 25 de Mayo) y en el Paseo Peatonal (25 de Mayo y Rivadavia), todos los días, de 17 a 20 horas. Y en el Parque Acuático “17 de Octubre”, en el circuito cinco, en el horario de funcionamiento del mismo.
Esquema
Arroyo reiteró, más adelante, que las dosis de refuerzo COVID-19, deben ser aplicadas a partir de los seis meses de vida, teniendo en cuenta el esquema recomendado, de acuerdo a las edades y a las condiciones de salud específicas de cada persona.
Especificó, con relación a eso, que actualmente se indica que “desde los seis meses de vida y hasta los 49 años, las personas que son sanas, es decir, que no tienen comorbilidades, deben aplicarse un refuerzo por año”.
Mientras que “deben recibir dos refuerzos en el año”, uno cada seis meses y, también, a partir de los seis meses de vida “las personas que tengan comorbilidades, como los enfermos crónicos, o los pacientes inmunosuprimidos”.
Además, deben seguir ese mismo esquema “de dos dosis al año, las personas que tengan desde 50 años en adelante, el personal de salud y el personal considerado estratégico y esencial”.
Herramienta clave de prevención
El especialista en inmunizaciones dijo, una vez más, “aunque la vacuna contra el COVID-19 aún no está incorporada al Calendario de vacunación, sigue siendo una herramienta fundamental para hacerle frente a la enfermedad”.
“Por ese motivo”, insistió “le seguimos pidiendo a la población que se aplique la vacuna y que esté al día con los refuerzos, porque está demostrado que es una gran defensa para evitar que las personas que contraen el virus evolucionen en formas graves y, en consecuencia, que puedan evitarse las internaciones y las muertes que puede causar”.