Las medidas económicas adoptadas por el actual Gobierno Nacional golpean a todos los sectores, ocasionando un desplome en las ventas.
En declaraciones recogidas por AGENFOR, Carlos Werlen, presidente de la Cámara de Pequeñas y Medianas Empresas de Formosa (CAPyMEF), se mostró preocupado por “la situación que estamos viviendo hoy a nivel país, donde no somos ajenos al problema nacional por la baja de las ventas”.
Según precisó, “en febrero se agravó aún más que en el mes de enero”.
“Los aumentos siguen golpeando los bolsillos de los consumidores entonces lógicamente se está agravando día a día este tema”, señaló.
Refirió que la semana pasada se realizó una reunión con la Cámara Argentina de Supermercados (CAS) y la Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (FASA), advirtiendo que “la preocupación es generalizada” y sumó el agravante del cierre de un supermercado de La Rioja, lo cual “alarmó a todos, pero el problema también surge en Rosario, Salta y en todo el país por la situación de la baja de las ventas”.
En el caso de Formosa “acompañamos la media del país, no podemos estar ajenos a este problema”.
Y no dejó de mencionar que también repercute la decisión del presidente Javier Milei de neutralizar la obra pública, lo cual “en nuestra provincia tiene mucha importancia por la cantidad de operarios que toma”.
“Por decisión del Gobierno Nacional, está totalmente paralizada y muchos trabajadores hoy están sin trabajo, eso golpea a los comercios de proximidad”, como minimercados o kioscos.
Además, agregó que “los mayoristas también tienen una baja de ventas a nivel nacional, al igual que los supermercados. Ya la tuvimos en diciembre, se agravó en el mes de enero y ahora se anexó el mes de febrero”.
“Veremos cómo va a venir marzo, más con el tema de Semana Santa, donde va a haber un movimiento importante”, planteó.
Explicó que en este marco de los nocivos efectos de las medidas macroeconómicas adoptadas por la Nación que repercuten en la economía doméstica, “el rubro lácteo es uno de los más golpeados por la baja que hay en la cuenca lechera, de un 30% menos de producción, y eso pega directamente en precios y en faltantes de mercadería, lo que ya estamos teniendo, porque algunos productos están faltando”, cerró.