El ministerio de Desarrollo Humano de la provincia recuerda a la comunidad que el dengue, la fiebre chikungunya y el zika son enfermedades virales transmitidas desde una persona infectada a otra por medio de la picadura del mosquito Aedes aegypti, insecto vector que tiene hábitos domiciliarios.
Sin mosquitos no hay dengue, tampoco fiebre chikungunya y zika ya que es el mismo insecto el que actúa de estas enfermedades que además comparten similares características en la sintomatología que presentan los pacientes.
Las jornadas lluviosas y cálidas son oportunas para que el agua se acumule en los recipientes y espacios naturales ahuecados que forman paredes. Dichos lugares son los preferidos por esta especie de mosquito para alojarse, poner sus huevos y reproducirse. Por esto, se debe tener un especial cuidado para evitar que queden al descubierto objetos –de cualquier tamaño- en los que pueda almacenarse el agua de lluvia y, al mismo tiempo, desechar el agua que en ellos pudiera acumularse.
La alta humedad favorece el desarrollo de varios tipos de insectos, entre los cuales se encuentra el Aedes aegypti. Si bien, la cartera de salud lleva adelante de manera ininterrumpida una fuerte campaña que incluye acciones establecidas y planificadas para evitar la presencia de mosquitos, el éxito de la campaña depende en gran medida de las medidas preventivas que pone en práctica cada vecino desde su casa, teniendo presente que el desarrollo del insecto se da en ámbitos domiciliarios y peridomiciliarios.
Se recuerda que los rociados y fumigaciones solo elimina al mosquito en estado de adulto. Esta acción debe ser necesariamente acompañada por la eliminación de los recipientes inservibles que acumulan agua y el tratamiento adecuado de los que se usan a diario y que se encuentran tanto en las casas como en lugares perimetrales (veredas, calles, baldíos) y otros espacios frecuentados por las personas.
Consejos
Desde el área de salud pública provincial se aconseja a los vecinos una serie de medidas que deben cumplirse cada día, y en especial en las jornadas lluviosas. En primer término se subraya que según su uso, los recipientes deben ser eliminados, desagotados, tapados herméticamente, lavados renovándose el agua, dados vuelta boca abajo o colocados bajo techo.
Por otra parte debe utilizarse repelente sobre la piel expuesta y asimismo sobre la ropa, la aplicación debe hacerse cada dos o tres horas. También es importante el uso de mosquiteros para protegerse en las horas de sueño, al igual que la colocación de telas mosqueras en puertas y ventanas para impedir el ingreso de los mosquitos a las viviendas. Entretanto que debemos ahuyentarlos con la aplicación de insecticidas domésticas en cualquier presentación: spray, aerosol, tabletas, espirales y otros.