Con el mismo ímpetu y entrega que el primer día, los equipos de salud del Ministerio de Desarrollo Humano de la provincia continúan la asistencia integral en las comunidades del oeste afectadas por el desborde del río Pilcomayo.
Cada semana los equipos interdisciplinarios se renuevan y provistos de todos los medicamentos e insumos realizan periódicas atenciones en terreno visitando a las familias en las casas, además de las atenciones en centros de salud y hospitales.
En cada salida, se realizan controles de salud por parte de un equipo médico, especialmente con atención a los niños de diferentes edades; embarazadas, y pacientes con enfermedades crónicas.
Los refuerzos de equipos de salud enviados desde capital se distribuyen en toda la zona afectada por el avance de las aguas y también las comunidades cercanas; con mayor fortalecimiento en Pozo de Maza, comunidad en la que se encuentran evacuadas provisoriamente las familias.
En los casos correspondientes, se entregan medicamentos e insumos para dar continuidad a los tratamientos prescriptos por el equipo de profesionales médicos; al igual que leche para la alimentación de los niños y suplementos nutricionales.
Algunas de las recomendaciones que se reiteran con frecuencia entre las comunidades es lavarse en forma continúa las manos, sobre todo antes y después de ir al baño, al terminar los niños de jugar en el patio, al acariciar a las mascotas y antes de comer.
Desde el área de inmunizaciones, los vacunadores insisten en la importancia de contar con el Calendario Nacional de vacunas actualizado, entendiendo que las vacunas son la mejor manera de prevenir enfermedades. Por este motivo visitan las distintas comunidades y aplican las dosis faltantes a cada uno de los integrantes de las familias.