En el entendimiento de toda la simbología representativa de Semana Santa que tienen el huevo y la rosca de pascua, una organización civil de la ciudad se puso manos a la obra con muchas madres de los comedores que la misma sostiene, y logro producir más de seiscientos de cada uno de estos productos y regalarlos a los niños de la misma asociación y de un jardín de infantes.
Se trato de la Asociación civil “Unidad, esfuerzo y Trabajo”, quien renovó un gesto de todos los años, es decir el regalar los tradicionales huevos de chocolate y la rosca de Pascua, subrayándose que no es solo una tradición consumista como algunos piensan, sino una costumbre en muchas familias.
Y bajo esta consigna es que un grupo de madres de los comedores de esta organización posee en los barrios Venezuela y La Colonia, junto a sus hijos se pusieron manos a la obra y elaboraron estos riquísimos productos pensando en la celebración.
“Los tiempos no son fáciles, aunque eso nos motivo mucho mas y junto a las madres muy animadas se sumaron al objetivo de elaborar seiscientas roscas y huevos de pascuas. Es así que cada familia que directa a indirectamente son beneficiadas de la asociación, pudieron compartir lo elaborado con mucho amor”, dijo la titular de la asociación, Arminda Quiñonez
Incluso y en lo que definió como una “permanente integración y colaboración” con la comunidad educativa cercana del barrio La Paz, llegaron con los huevos y roscas al Jardín de Infantes 6 en el turno tarde, y obsequiaron a niños y docentes los mismos.
La directora del JIN 6, Yolanda Espinoza, agradeció el gesto que puso felices a los niños, ponderando que es parte de las actividades que articulan con esta asociación, entre varias otras que se propician a lo largo del año.
Comento la dirigente Quiñonez que “desde el 2001, en aquel tiempo para morigerar la tremenda crisis de entonces, no paramos de llevar adelante obras solidarias como estas. Para las fiestas de fin de año con los panes dulces, juguetes en día del niño y reyes, y también en Pascuas como ahora”.
Indico que en los comedores que están bajo su órbita estuvieron con los niños no solo para compartir unas roscas y huevos de chocolate, sino que también se les habló sobre el significado de esta Semana Santa y las Pascuas, la muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo.
“Pensando en las familias de escasos recursos es que nos propusimos en renovar esta idea. Y sobre todo por los niños, que son los que más disfrutan del tradicional chocolate y otros productos panificados que se consumen habitualmente en esta fecha”, afirmo.
Comento finalmente que en los comedores también se trabaja en la elaboración de panificados, facturas y pastafloras, que se comparte en el desayuno, almuerzo y merienda, aprovechándose esos momentos de compartir la mesa para contar algunas historias sobre que “los huevos de Pascua son una referencia a esa vida que Jesús nos trae”, y también que “desde tiempos antiguos, distintas culturas usaron huevos coloreados para simbolizar el nacimiento y la fertilidad”.