Coincidente con la fiesta patronal de la Virgen del Carmen que se celebra todos los 16 de julio, el Servicio Penitenciario Federal conmemoro su 85° aniversario.
En Formosa la evocación se llevo a cabo frente al edificio de la Unidad 10, sobre avenida 25 de Mayo y Deán Funes, y fue encabezada por el ministro de Gobierno, Justicia y Trabajo, Jorge Abel González junto al el director de la unidad carcelaria local, subprefecto Walter Darío Suarez, y representantes de la plana mayor de las distintas fuerzas de seguridad con asiento en la provincia.
Suarez expuso como característica saliente la “vocación de servicio” del personal de la fuerza, ponderando que la institución “creció en todo sentido, en personal, infraestructura y más que nada evolucionando”, ejemplificando: “se vino del grillete al traje a rayas a la reinserción social de los condenados”.
Otro aspecto subrayado fue el “avance marcada de la ciencia penitenciaria, siendo el país pionero en América en materia de ciencia penitenciaria. “Y seguimos siendo valorados por esta ciencia empírica más que teórica y que viene de la experiencia cotidiana”.
Expuso que la población carcelaria de la U-10 es de 115 internos y uno más alojado en el anexo, insistiendo en resaltar “la gran labor de todo el personal que trabaja para lograr la reinserción de quienes se encuentran privados de su libertad”.
Renovó que la institución tiene como objetivo la custodia y guarda de internos condenados y readaptados a una pena privativa de la libertad, para cumplir con ese objetivo institucional, que es predominantemente social.
Indico que el Servicio Penitenciario cuenta con dos componentes importantes: la educación y el trabajo en distintos talleres que brindan herramientas fundamentales para que los internos puedan desenvolverse en la vida libre. Los agentes penitenciarios construyen una personalidad capaz de entender e internalizar la importancia de la reinserción de los internos una vez que salen en libertad.