Desde este martes 16, se pone en marcha el Programa Alimentario Provincial “Nutrir”, habilitándose los primeros centros de distribución, la entrega de tarjetas magnéticas y bolsones conteniendo variado y balanceado productos alimenticios: Cereales, frutas, verduras, legumbres frescas, hortalizas, leche, miel, carnes vacuna y de pollo, conforman la nutritiva canasta.
Quien ratifico la apertura del plan que anunciara el pasado viernes el gobernador Gildo Insfrán, fue el ministro de la Comunidad, Aníbal Gómez, cartera responsable de esta estrategia tendiente cubrir los requerimientos alimenticios de los sectores sociales más vulnerables, afectados por la compleja realidad derivada de las medidas económicas nacionales.
Indico que uno de los centros operativos será en la Jurisdicción Cinco, y que los beneficiarios que allí estarán concurriendo ya fueron notificados. Se les hará entrega de la tarjeta y explicara todo el mecanismo de funcionamiento para acceder al beneficio cada 15 días, lapso en el cual deberá concurrir a retirar esta canasta alimentaria variada y saludable que en el mercado tiene un valor de $4000 estimativamente.
Aclaro el ministro que “los ocho centros previstos abrir y donde las familias deberán acudir a retirar los bolsones se irán habilitando de manera progresiva, y la misma gradualidad se dará en relación a las 15 mil familias previstas llegar con el beneficio en esta ciudad, además de toda la fase de expansión al interior”.
Clarifico que “establecer a las familias beneficiadas se dio a partir de un relevamiento en comedores comunitarios, los beneficiados de la tarjeta social y del cruzamiento de datos, a muchas de ellas ya se informo de estar dentro del listado de favorecidos por el plan y a las restantes se hará lo propio a domicilio en estos días”.
Advirtió el “acentuado deterioro social a partir de una creciente dificultad de acceso a la alimentación suficiente, variada y saludable producto de las políticas nacionales, que se acentúa en franjas como la niñez, adultos mayores y las embarazadas, donde se advierten “crecientes cuadros de desnutrición y malnutrición en todas sus formas”. siempre favoreciendo al segmento de mayor vulnerabilidad alimentaria y que han sido determinados a partir del cruzamiento de base de datos.
Como mecanismo de instrumentación se dispuso la entrega de una tarjeta magnética identificatoria, la cual habilitara a las familias retirar los alimentos de ocho centros de distribución situados estratégicamente en diferentes sitios de la ciudad. Todos ellos equipados con los equipos necesarios, que permitan por ejemplo mantener la cadena de frio tan necesaria para mantener los alimentos frescos y bien conservados.
Con esta tarjeta cada familia accederá cada 15 días (en fecha que se informara con anticipación) a una canasta alimentaria variada y saludable. La misma, diseñada por nutricionistas y médicos asegura una dieta equilibrada en proteínas, carbohidratos, lípidos, vitaminas y minerales.
La composición de esta canasta será con cereales, frutas, verduras, legumbres frescas, hortalizas, leche, miel, carnes vacuna y de pollo. Todo este componente tendrá un valor de mercado estimado en los $4000.