Periodos obligatorios de siembra de algodón en Formosa
Con esta medida, el Senasa busca prevenir la dispersión de focos del picudo algodonero.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) recuerda que hasta el 15 de noviembre está permitido sembrar algodón al Este de la Ruta Nacional Nº 95, en la provincia de Formosa, y del 1 de noviembre al 15 de diciembre, al Oeste de la misma; según la Resolución N°74/2010 y la Disposición N°5/2013 de su Dirección Nacional de Protección Vegetal (DNPV).
La norma fija obligatoriamente fechas de siembra y destrucción de rastrojos, con el objetivo de lograr un vacío sanitario de 90 días sin cultivo en el lote con el fin de quitarle el alimento al picudo del algodonero. Las fechas de siembra del algodón, que varían conforme a las zonas donde se localiza el algodón, son establecidas junto con provincias algodoneras y actores intervinientes en la cadena del cultivo.
Tales fechas no fueron establecidas de manera aleatoria, sino que se fundan en factores que facilitan el desarrollo del cultivo, optimizan su rendimiento y previenen sucesos fitosanitarios desfavorables.
“Es importante que el productor respete las épocas de siembra y destrucción de los rastrojos a fin de dificultar la supervivencia y reproducción del picudo algodonero y así prevenir la dispersión de focos. En caso de que se vulneren dichas fechas, el cultivo podría verse afectado en sus rendimientos”, explicó el director del Centro Regional Chaco-Formosa del Senasa, Enrique Orban.
El picudo del algodonero es considerado la plaga más dañina de ese cultivo. El enorme potencial de destrucción se debe a la alta capacidad reproductiva y a las numerosas generaciones que se producen en un ciclo agrícola. Las cuantiosas pérdidas que ocasiona y la dificultad de su control son responsables de la gran reducción del área de siembra en países en donde la plaga está instalada.
Para preservar el patrimonio algodonero nacional el Senasa ejecuta el Programa Nacional de Control y Erradicación del Picudo Algodonero – con el apoyo de otras entidades públicas y privadas – en el que tienen preponderancia el monitoreo de la plaga (Anthonomus grandis) y la fiscalización de las acciones preventivas.