El ministro de la Comunidad, doctor Aníbal Gómez, presidio este viernes la entrega de más de 200 nuevas tarjetas a igual número de familias en estado de vulnerabilidad alimentaria y nutricional que accedieron al Plan Provincial Alimentario “Nutrir”.
Se cuantifican en casi 15500 las familias beneficiadas a la fecha, las cuales de esta manera acceden a alimentos frescos, nutritivos y saludables producidos por los pequeños productores agropecuarios formoseños o “paipperos. Logran mitigar de manera sensible los efectos de la crisis económica y social causada por las actuales políticas del gobierno nacional.
Con esta tarjeta cada familia accederá cada 15 días a una canasta alimentaria variada y saludable. La misma, diseñada por nutricionistas y médicos asegura una dieta equilibrada en proteínas, carbohidratos, lípidos, vitaminas y minerales. La composición de esta canasta es con cereales, frutas, verduras, legumbres frescas, hortalizas, leche, miel, carnes vacuna y de pollo.
“Es un beneficio de enorme valor para cada familia que accede a una variada y nutritiva gama de alimentos, sobre todo en estos momentos donde la situación socio-económica del país es muy compleja. Frutas, verduras, hortalizas y legumbres son parte de esta canasta de víveres que mejoran sensiblemente la nutrición familiar”, destaco Gómez.
Anticipo que similar entrega continuará la próxima semana con una cantidad similar a aquellas familias cuyas condiciones se ajusten a las exigencias establecidas.
El ministro expuso que “la población objetivo inicial era de 15 mil familias, pero ante un cuadro de situación social que se fue agravando el número de familias en situación de vulnerabilidad fue creciendo, sobre todo a partir de la escalada en el precio de los alimentos”.
Explico que esta tarea le demanda a una dinámica particular en toda la ingeniería organizativa coordinadamente con municipios y paipperos. Es que en su mayoría no se trata de productos que puedan estar guardados en un depósito, sino que se debe ir por cada colonia obtener las cargas de frutas, verduras, hortalizas y otros alimentos que llegan al centro de acopio primero y por supuesto, lo más fresco posible a cada familia.
Desfasado
El ministro aludió a que el Plan Nacional de Seguridad Alimentaria (PNSA) en vigencia desde la presidencia de Néstor Kirchner puede mantenerse vigente en la provincia a partir de recursos propios que desembolsa regularmente la gestión Insfrán. “Los recursos nacionales han quedado totalmente desfasados y las partidas como las destinadas a la Tarjeta Social se mantienen en una suma irrisoria de $130 por mes, que incluso no llega regularmente, imagínese que puede adquirir una familia con ese dinero”, expuso,
Concluyo diciendo optimista que “seguimos insistiendo en pedir a las familias a que actualicen sus tarjetas, tenemos la esperanza de que un nuevo gobierno modifique sus políticas, sobre todo las de carácter social a favor de los más humildes. Los módulos alimentarios a familias aborígenes y el plan Nutrir son dos medidas concretas de la provincia en este marco de emergencia alimentaria que está viviendo el país”.