Una nueva jornada formativa sobre diabetes gestacional tuvo lugar en el hospital de la Madre y el niño, dirigida al personal de salud de este nosocomio con el objetivo de ampliar los conocimientos sobre esta patología cada vez más frecuente en las embarazadas.
El encuentro fue organizado por el equipo del Programa Provincial de Diabetes y convocó a profesionales médicos, enfermeros, nutricionistas y residentes de dichas disciplinas. Las exposiciones estuvieron a cargo de especialistas en diabetes, clínica médica y endocrinólogos.
Entre los puntos se trató acerca de los síntomas, diagnóstico, tratamiento y maduración pulmonar del bebé. Al respecto, según lo informó la referente del programa provincial, licenciada María Rosa Argüello, el hincapié fue puesto en “la importancia del diagnóstico temprano, el tratamiento y seguimiento de la paciente para cuidar la salud del binomio madre – hijo”.
Además se habló también de “las estrategias más convenientes que deben utilizarse frente a un eventual diagnóstico de diabetes gestacional: cuándo y cómo se hace el diagnóstico, y cómo llevar el tratamiento tanto en pacientes internadas como en ambulatorias para alcanzar una mayor efectividad”, añadió.
Asimismo, de manera detallada, explicaron sobre la importancia de la maduración pulmonar del bebé que está en la panza de una mamá con esta patología “sobre todo cuando se trata de una diabetes gestacional complicada durante el embarazo, que requiere que el niño tenga una maduración pulmonar adecuada para que tenga dentro del vientre un sufrimiento fetal”, comentó Argüello.
La capacitación contó además con la presencia del personal de salud de las localidades de Riacho He Hé y Las Lomitas, quienes se sumaron a sus pares locales para interiorizarse sobre esta enfermedad que aparece durante el embarazo y se caracteriza por el nivel alto de azúcar en sangre.
¿Por qué es necesario que la embarazada reciba el diagnóstico y tratamiento oportuno?
Durante el embarazo, la placenta, que conecta al bebé con tu suministro de sangre, produce niveles altos de otras hormonas. En la diabetes gestacional, las hormonas de la placenta provocan un incremento del azúcar en sangre hasta un nivel que puede afectar el crecimiento y la salud general del bebé.
La diabetes gestacional suele diagnosticarse entre la semana 26 y 28 de embarazo tras realizar a la futura mamá el Test de O’Sullivan. Esta prueba indicará el nivel de glucosa en sangre. Si los valores son elevados, se dice que la mujer tiene diabetes gestacional.
No es una enfermedad grave pero sí requiere de un tratamiento a base de una adecuada alimentación y actividad física para controlarla y así evitar riesgos innecesarios para el bebé que está creciendo dentro del útero.