Distintos referentes de organismos provinciales mantuvieron una reunión este viernes en el quinto piso de la Casa de Gobierno para evaluar las alternativas a seguir en la reubicación de 120 familias afectadas en Pozo de Maza (departamento Bermejo) por la crecida del río Pilcomayo.
La reunión fue encabezada por el Jefe de Gabinete Antonio Ferreira, y participaron todos los ministerios del Poder Ejecutivo, subsecretarías, direcciones, el Servicio Provincial de Agua Potable, Refsa, quienes analizaron la situación, una vez superada la etapa más crítica de la creciente del río Pilcomayo.
Así lo explicó el diputado provincial Roberto Vizcaíno al señalar que la etapa más crítica pasó aunque existen algunos signos de alerta en la Alta Cuenca, pero subrayó que son positivos los trabajos para conducir en agua con obras de correderas y de defensa, sobre todo para los parajes más críticos como El Quebracho, La Rinconada.
“Estamos trabajando allí, y en la repartición de las aguas, el 40% entra al territorio paraguayo, el 60% al territorio nuestro, lo cual hacía muchos años que no ocurría y eso nos perjudicaba más no solo por la masa de agua, sino por la masa de sedimentos que es lo que más nos complica” explicó el legislador.
“Estando superada esta situación que siempre fue crítica, ahora nos abocamos a la reubicación de aquellos que fueron afectados, ya llevamos un año y medio. En eso trabajamos, con todas las áreas de gobierno. Tenemos un diagnóstico, las tareas a realizar, las compartimos con las comunidades qom que son mayoría, como con las criollas, el área social, también económica, donde hay ganado mayor y menor. Es reubicar las poblaciones en lugares altos, es un área del departamento Bermejo y Ramón Lista, donde no tenemos definidas alturas, no hay nada seguro a lo largo de los años” detalló.
Insistió en señalar que “Estamos bien con las obras del Pilcomayo y preocupados de la reubicación de la gente en forma más estable, con todo lo que eso lleva de infraestructura, de servicios, luz, agua, vivienda, escuelas, eso es lo que planificamos. Llevará un tiempo, es un proceso, debemos definir el espacio territorial, dado que no tenemos zonas de altura definidas para ejecutar obras a largo plazo”.
Detalló que se trata de 120 a 140 familias y otras que ya se relocalizaron por sus propios medios, pero que deberán contar con el acompañamiento estatal.