El ministro de Economía, Hacienda y Finanzas de la provincia, el doctor Jorge Ibáñez, habló sobre las negociaciones que lleva adelante el país en torno a la reestructuración de la deuda pública externa con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y los acreedores externos.
Dijo “no es una tarea para nada sencilla”, pero que confía “llegarán a buen puerto”, para de esa manera, profundizar las políticas de reactivación de la economía del país y sobre todo “las provincias aguardamos conocer con qué recursos vamos a contar para este año 2020”, debido a que “estamos funcionando con un presupuesto prorrogado”.
El ministro fue tajante en señalar que el “punto de partida es que esto es una catástrofe económica a raíz de los cuatro años de Mauricio Macri”, a partir de los números que va difundiendo el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), como ser la inflación del 55% en el 2019, el desempleo en dos dígitos, la pobreza ronda el 40%, fue enumerando algunos de los datos que retratan la profundidad de la crisis.
Por ello, pidió a la oposición de Juntos por el Cambio que “guarden silencio como mínimo” porque “ahora resulta que quienes gestionaron esta catástrofe económica en los cuatro años de Macri se visten de fiscales impiadosos de la gestión del presidente Alberto Fernández que lleva 60 días al mando del Ejecutivo”.
Coincidió con el Presidente de la Nación en que hoy la prioridad “son los que más sufrieron estos cuatro años, a quienes se debe alcanzar con las medidas que se van adoptando, que si bien a algunos sectores puede molestar lamentablemente son necesarios para después alcanzar a todos”.
En ese sentido, mencionó el anuncio de la vuelta del Programa Remediar que “apunta a que la gente que está más golpeada por la recesión económica pueda volver a tener por ejemplo 50 o 60 medicamentos gratuitos. Ésta es una medida más que se suma a la de las tarjetas alimentarias que no solamente apunta a que las familias tengan un plato de comida sino también reactivar en cada una de las provincias la producción interna”.
Acerca de las negociaciones por la deuda externa con el FMI que días atrás emitió un comunicado en el que le da la razón al planteo argentino en que la deuda “es insostenible”, sostuvo que es un grave problema que“como lo viene sosteniendo el presidente de que este endeudamiento irresponsable y monstruoso que no registra antecedentes en la economía de ningún país del mundo”.
Sin embargo apuntó: “El Fondo le otorgó al Gobierno anterior que no tenía sustentabilidad económica alguna y que es el préstamo más grande de la historia del organismo internacional de crédito”, coincidiendo con la denuncia del ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, que dijo que el FMI es co-responsable del sobre-endeudamiento que hoy tiene el país.
Opinó que “es optimista de que se va a solucionar el tremendo problema de la deuda, que es fundamental para poner a la economía nuevamente en marcha”.
Recordando las palabras del doctor Pugliese, quien dijo «les hablé con el corazón y me respondieron con el bolsillo», marcó que a muchos banqueros y fondos buitres “no les importa el sufrimiento de la gente o la desocupación de los pueblos”.
Se trata de una deuda que tomó Macri en el 2018, cuando fue el Fondo para solicitar el préstamo de 57 mil millones de dólares y que “el organismo no le pidió absolutamente nada” y “ahora que hay un gobierno que quiere pagar, pero no a costilla del hambre del pueblo le exigen varios requisitos”, condenando el accionar del organismo de crédito y que incluso ese dinero “entró al país y se fugó de inmediato”, añadió.
Seguidamente pidió poner en valor las palabras del Papa Francisco, quién más allá del caso argentino “siempre viene hablando de que la deuda y el negocio financiero no puede dejar a millones de personas en el mundo viviendo en la miseria nada más que por el lucro financiero”, que el Sumo Pontífice denomina como el “capitalismo financiero desenfrenado”. Y fue fundamental “la ayuda que le brindó a la Argentina en esa reunión con los líderes de los países europeos y las autoridades del FMI en el Vaticano”, agregó.
Para terminar dijo que “las negociaciones que no son para nada sencillas, soy optimista que llegará a buen puerto”, para así continuar con la “reactivación de la industria nacional, las pymes, el comercio, hay que darle trabajo a la gente, poner en marcha nuevamente el consumo interno”.
La obra pública
Siguiendo con las políticas nacionales que vuelven a poner en marcha la economía, aseguró el ministro de Economía, Hacienda y Finanzas que “la obra pública es otro de los grandes temas que necesitamos reactivar sobre todo en provincias donde la obra pública es uno de los motores de la economía. En especial la cuestión de la vivienda a través de un plan que nos permita en cada pueblo volver a ejecutar viviendas, que den trabajo a la gente, con insumos nacionales y en gran medida también con insumos locales”.
Precisó que por ejemplo el plan de viviendas para las comunidades aborígenes “lo quitaron desde el Gobierno anterior”, el programa estaba dirigido a la construcción de unidades habitacionales para los pueblos originarios y que incluso denunció que “en tiempos del macrismo nacional hubo un funcionario que acá se rasgaba las vestiduras en defensa de los pueblos originarios pero que en materia de viviendas no hizo absolutamente nada”, y que el mismo panorama sucedió con el programa de viviendas rurales destinado a los pequeños productores.
Y concluyó: “Hay que poner en marcha tantas cosas de nuevo en la Argentina”, insistiendo que no es una tarea fácil pero que “la gente va a acompañar porque comprende la situación y tiene una gran esperanza” con el nuevo Gobierno Nacional que asumió el 10 de diciembre de 2019.
Tarifas
Luego fue consultado sobre las declaraciones del jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero, que sostuvo que en junio se tratará nuevamente los valores de las tarifas de los servicios públicos y que se readecuarán de acuerdo a la capacidad económica de pago de las familias.
El funcionario manifestó que las palabras de Cafiero refieren a marcar un rumbo en el sentido de pensar que “no puede haber un tarifazo descomunal como el etapa macrista porque la gente está agobiada”, mencionando que incluso fue la provincia que con fondos genuinos continuó con la ayuda del programa de tarifa social a familias formoseñas, que suman más de 60 mil beneficiarios con este programa provincial.
Por eso indicó que el tratamiento tarifario de los servicios “debe tener como comprensión que no todos tenemos la misma capacidad de pago porque hay gente que no puede pagar más aumentos y además porque esto después se traduce en el alza de precios y por ende en la inflación”.
Es justamente ése uno de los motivos principales que produjo el cierre de miles de pymes en el país como consecuencia de los tarifazos que asfixiaron al sector de la pequeña y mediana empresa.
Pago a estatales
Afirmó que el pago de los sueldos a la Administración Pública como es habitual será los últimos días del mes, pero sin confirmar fecha exacta.
En tal sentido, acotó que Formosa, junto a provincias como La Pampa, San Luis y Santiago del Estero, “no tenemos problemas financieros y vivimos con nuestros recursos”.
Explicó que hay otras administraciones provinciales que no pueden afrontar el pago de los sueldos, como el caso más grave de la provincia de Chubut, donde incluso se especula con la emisión de cuasimonedas. Y también un grupo de estados que “están tremendamente endeudados en dólares” porque tomaron créditos y con la disparada del dólar esas deudas hasta incluso se triplicaron.
Por último, vinculado a la cuestión financiera de la provincia, el ministro informó que la recaudación fiscal de enero “en números reales no fue buena tanto en el orden provincial como nacional” e indicó que “veremos cómo cierra febrero y a partir de la primera semana de marzo el gobernador Gildo Insfrán va a tener un panorama de los primeros dos meses y las posibles variables en relación de la evolución de los recursos coparticipables”.
A razón de las negociaciones salariales, hoy se siguen de cerca las paritarias nacionales de los docentes, asegurando que “no contar con un presupuesto nacional 2020”.
Este inconveniente provoca dijo que “no sabemos cuáles son las variables macroeconómicas para este año, con lo cual tampoco sabemos los cálculos del Ministerio de Economía en lo que atañe por citar algunos ítems: el precio del dólar, la pauta inflacionaria, las tasas de interés de referencia y el cálculo de recursos que se enviará a las provincia”.
Afirmó que la “prórroga te permite funcionar, pero indudablemente necesitamos contar con el presupuesto nacional 2020”, que según indican desde la Nación se trataría posterior al acuerdo con el FMI, para abril o mayo.