El jefe del Estado argentino apuntó contra sectores de la oposición y de parte del empresariado que critican la cuarentena. «No se puede jugar con eso», sostuvo
El presidente de la Nación, Alberto Fernández, afirmó, que «hay una gran irresponsabilidad» de algunos sectores de la oposición y de parte del empresariado que critican el aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia de coronavirus, al calificar como «falso» el concepto de que «una economía pujante» aguarda a la salida de la cuarentena, ya que «afuera hay un mundo paralizado».
En una extensa entrevista en la radio FM Futurock, Fernández se refirió a la extensión del aislamiento social hasta el 24 de mayo anunciada este viernes por la noche y criticó a algunos de los dirigentes políticos y economistas que recomiendan terminar con estas medidas.
El jefe de Estado también cuestionó a los bancos privados por su rol en la pandemia y a sectores vinculados a las grandes empresas del país.
Admitió que está «un poco enojado» con aquellas voces que se manifiestan en contra del aislamiento social porque «no se puede jugar con eso», y recordó que se atraviesa por «un momento muy delicado».
«Estoy contento con el esfuerzo que hacemos los argentinos porque de a poco los objetivos que nos propusimos van saliendo, pero no hay que bajar los brazos. No hay que dejarse llevar por las voces que siempre aparecen», agregó.
«Hay una gran irresponsabilidad», sentenció Fernández en referencia a las actitudes de parte de la oposición que no tiene la obligación de gestionar.
«Vienen y te dicen que tenemos que seguir modelos y que la cuarentena no sirve de nada porque de todas maneras el contagio va a llegar y lo mejor es que todo ocurra rápido. Te dicen que hay que seguir el ejemplo de los que no hicieron cuarentena. Miren a Brasil y fíjense los muertos que hay», remarcó.
Y en ese sentido, agregó. «Esta gente que habla así, no le pesa las muertes que hay en Argentina. A mí me duele horrores. Cuando veo que murió uno más, yo sufro».
A la hora de comparar la situación económica de los países que adoptaron medidas de confinamiento menos estrictas que Argentina, el Presidente se remitió al caso de los Estados Unidos.
«Si es verdad que sin cuarentena la economía funciona bien, fíjense el caso de Estados Unidos, que fue reacio a poner el aislamiento y tiene un alto desempleo. También hay muchos muertos», remarcó.
En esa línea, manifestó que «es falso que saliendo de la cuarentena hay una panacea de una economía pujante porque afuera hay un mundo paralizado» porque la pandemia «dio vuelta la economía».
Sistema financiero
En un cuestionamiento al sistema financiero argentino, el Presidente dijo que «es extraño porque le presta plata al que no la necesita, le presta al que tiene plata y a los que no tienen les ponen tantos reparos que nadie puede acceder a un crédito».
En el marco de la actual emergencia sanitaria, el mandatario destacó que «el Banco Central ha hecho un enorme esfuerzo durante este tiempo al bajar las tasas (de interés), con lo que le ha quitado un margen de la ganancia desmedida que tenían los bancos», pero reconoció que eso «no es suficiente».
«El Central también alivió muchas cargas para los que toman créditos. Por eso les recomendó a los bancos –privados- que den préstamos a algunos –clientes- que estén en el Veraz o tengan cheques rechazados, pero son renuentes y siguen poniendo obstáculos», contó.
Adelantó que con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, están hablando «hace dos semanas para ver que presión se le puede poner a los bancos para que presten», y reseñó que el Gobierno Nacional le «liberó encajes para esos fines».
«Necesitamos un poquito más de tiempo para corregir regulaciones y corregir conductas. Hay que cambiar muchas cosas», remarcó sobre el sistema financiero nacional.
Empresariado
El mandatario también fustigó a parte del empresariado al considerar que «son muy ingratos con el momento que le toca pasar al país» y evaluó que «no tienen» responsabilidad social».
En otra parte de la entrevista radial, el Presidente consideró que ante esta pandemia existe «una oportunidad maravillosa de hacer un mundo más justo y más equilibrado porque este mundo no funciona».
«Este mundo que concentra la riqueza en tan pocos y distribuye la pobreza en millones no sirve para nada. No se trata de hacer un sistema socialista, sino más realista con más justicia social», subrayó. (Télam).