Para el rezo personal se permitirá hasta diez personas en el templo en el horario de 9 a 16 horas. El párroco Antonio Caballero explicó las disposiciones previstas en el marco de la emergencia sanitaria.
Se reabrieron las puertas de las iglesias, templos y lugares de culto en el país. Fue a partir de la decisión administrativa de la Jefatura de Gabinete de la Nación que habilitó la actividad religiosa, pero con una serie de medidas de cumplimiento obligatorio. En tal sentido, el párroco de la iglesia Catedral “Nuestra Señora del Carmen”, Antonio Caballero, brindó detalles de cuáles son las actividades permitidas, y el protocolo sanitario que deberán seguir los fieles.
La iglesia Catedral “Nuestra Señora del Carmen” ubicada en la avenida 25 de Mayo casi Moreno en la ciudad capital, abrió sus puertas este lunes. Pero, siguiendo una serie de medidas dispuestas para esta actividad religiosa por parte del Estado nacional, a lo cual la Provincia adhirió, en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio en la Fase 4 de la pandemia del coronavirus.
En tal sentido, el sacerdote Antonio Caballero, destacó la decisión de reabrir las iglesias en todo el país, marcando que en el caso de Formosa «coincide esta apertura con este tiempo de preparación general en torno al 16 de julio”, que se conmemora el día de la Virgen del Carmen, haciendo notar que “vamos a colaborar con las autoridades sanitarias en cuanto a lo que prescriben”.
Para ello, anunció que los fieles podrán asistir para la atención espiritual, pero “en el caso de que lo necesiten”, y para lo cual deberán contar con un turno programado. “Estamos poniendo en condiciones el turnero para ofrecer este servicio”, confirmó, el padre, quien es el responsable de esta actividad en La Catedral.
No obstante, esta atención espiritual “es solamente para la gente que vive alrededor de la iglesia”, afirmó, a los fines de evitar traslados de la gente de zonas más alejadas.
La norma nacional además aclara que en ningún caso tales actividades podrán consistir en la realización de ceremonias que impliquen reunión de personas. En este punto, enfatizó que la oración personal es abierta a la gente, pero se permitirá un máximo de 10 personas en el templo, “para ello estamos poniendo en condiciones las instalaciones, para así adecuarnos al protocolo que se exige”.
Entre las medidas de higiene dispuestas en el protocolo se destacan la colocación de alcohol en gel a la entrada y a la salida del templo, el uso de barbijos, el respeto de distancia mínima de dos metros entre las personas y no se permitirá que haya más de una persona por banco.
“La disposición dice que seis personas pueden estar sentadas en los bancos y dos arrodilladas, con lo cual habrá ocho fieles, más el cura y el empleado que trabaja en el lugar, siendo en total diez personas como máximo”, explicó.
Por ese motivo, el rezo personal para cada uno de ellos será de 10 minutos, para dar paso a otras personas, en el horario de 9 a 16 horas, y con la salvedad que los baños, no estarán habilitados para su uso.
Siguiendo con la disposición nacional la salida debe ser por otro camino, lo cual añadió: «Estamos esperando la cartelería para indicar en el lugar cada área, así agilizamos el trámite para las personas, y especialmente cuidamos la salud de todos».
Para finalizar, el padre Antonio Caballero, le brindó la bendición a todas las familias formoseñas, a quienes les reiteró: “La necesidad de quedarnos en casa, la intención de nuestro mensaje es reforzar el aislamiento social, preventivo y obligatorio que es muy importante en estos momentos, colaborando así con las autoridades sanitarias”.
Mientras que una mujer que se acercó este lunes a rezar a la iglesia Catedral dijo: “Era necesario contar con la apertura de la iglesia para mí es una felicidad poder nuevamente estar frente a Dios, quien es el único que nos va a salvar ante esta pandemia y todo lo que está pasando en el mundo”.