“El agradecimiento y reconocimiento al Modelo Formoseño, ya que estas carreras pueden seguir desarrollándose gracias a la conducción política del Dr. Gildo Insfrán”, advirtió la licenciada Ana María Del Riccio, coordinadora de Asuntos Educativos del IUF
La comunidad educativa no fue ajena a los cambios que produjo la pandemia del nuevo coronavirus, la suspensión del dictado de clases presenciales fue una de las primeras medidas tomadas por el gobierno nacional y apoyada e implementada desde el provincial.
Este marco, encontró al Instituto Universitario de Formosa (IUF), con el Curso Introductorio a los Estudios Universitarios finalizado, pero llevó a directivos y cuerpo docente a enfrentar el desafío de avanzar en las clases tanto para iniciados como para quienes se encontraban avanzados en las carreras de Ingeniería en Producción Agropecuaria y las licenciaturas en Turismo y Ciencias Ambientales.
Para Del Riccio, esta situación fue “una gran responsabilidad y un gran desafío, porque hubo y hay que estar a la altura del correcto uso de los recursos tecnológicos, dándole una finalidad pedagógica, la cual requiere de compromiso y trabajo en la didáctica profesional”.
En este sentido, valoró las políticas públicas nacionales y provinciales, “hay que mencionar al plan Conectar Igualdad a nivel nacional, o el soterrado de fibra óptica en la provincia que permite el acceso de Internet a hospitales, escuelas, comisarías e instituciones, son decisiones políticas que fueron achicando la brecha digital que existía respecto al acceso a la información y al conocimiento”.
La coordinadora señaló que “existe un sostenimiento del cien por ciento por parte del Gobierno de la provincia, que apuesta siempre y sobre todo en esta situación de emergencia a la educación pública universitaria; y cómo sigue considerando la necesidad de carreras estratégicas como la Ingeniería en Producción Agropecuaria, por ejemplo”.
Asimismo, indicó que el Instituto puso en marcha diferentes dispositivos, “fueron necesarias diferentes capacitaciones para estudiantes y docentes, porque desde la educación tenemos que considerar y analizar que por sí mismo un recurso pedagógico no genera aprendizajes profundos y significativos, sino, que son los modelos y concepciones pedagógicas las que lo hacen”.
Para ello, es menester hacer un “buen uso de los recursos” y en el caso del IUF, se han aplicado diferentes mecanismos, como las tutorías de seguimiento para estudiantes, de estudio, de acompañamiento y permanentes diálogos con los docentes.
Del Riccio informó que participan de los diálogos semanales unos 60 docentes en donde se ponen en común las producciones de cada cátedra, como también las diferentes experiencias, “son dispositivos institucionales de acompañamiento para poder afianzar la inclusión y estar a la altura de las circunstancias en el uso de los recursos tecnológicos”, comentó.
Días de clases
“Las 55 cátedras que se dictan en el IUF están aprendiendo, estudiando y avanzando a distancia; como lo hacen todas las universidades del sistema educativo provincial- que ha sido muy claro y muy definido con las medidas del Consejo de Atención Integral a la Emergencia COVID-19- para la realización de las clases a distancia”, advirtió la coordinadora educativa.
Con respecto a los exámenes, informó que antes del receso se han tomado los exámenes extraordinarios de manera virtual a quienes adeudaban 3 materias y que dos estudiantes quedaron a tan solo una materia de culminar su carrera, es el caso de dos futuras egresadas en Ciencias Ambientales y en Turismo.
La licenciada, remarcó que en el IUF se enseña de manera integral y con una concepción de las políticas públicas que son protagonistas en este contexto de pandemia, “la mirada a la realidad local es esencial, la mirada hacia el PAIPPA, al Plan Alimentario Nutrir, a las políticas públicas que se están aplicando en la provincia -que son de profunda inclusión y equidad- son cuestiones que atraviesan a las cátedras porque tienen que ver también con la producción local, con cómo se incluye a través de estas medidas el punto de vista comunitario y social”.
“Hay una cuestión central que tenemos, que es la ética de todas las materias, la de dar prioridad a la vida en comunidad y a las medidas sanitarias, todas las materias tienen que tener en claro la realidad local, la situación que estamos atravesando y pensar en lo colectivo, en lo público, porque si bien las clases presenciales no están, no tenemos que perder de vista el sentido solidario, la necesidad de encontrarse con el otro, por eso se tiene en cuenta a los grupos de estudiantes, sus interacciones, y también nosotros generarles interacción entre pares para que no se pierda este sentido colectivo de lo institucional que tiene que ver con la educación pública”, finalizó.