A la hora de las cuestiones de privilegio, el presidente del bloque Frente de Todos, José Mayans, usó ese pasaje para responder las que habían hecho previamente dos senadores de Juntos por el Cambio: Laura Rodríguez Machado y Luis Naidenoff.
A la primera, que había reprochado que la presidenta del cuerpo no le dio en la última sesión la palabra cuando la pidió luego de que se anunciaran una serie de modificaciones al dictamen del proyecto de reforma judicial, le contestó con el reglamento. Mayans sostuvo que durante ese debate “no se le negó la palabra a nadie, y el que la pidió la tuvo y se le respetó el uso de la palabra”. Pero aclaró que una vez que cierran el debate los jefes de los bloques, luego de que lo hace el presidente del bloque de la mayoría, la presidenta tiene que someter a votación el proyecto. Y solo puede suspender la votación la miembro informante, que recepta todas las modificaciones si los senadores quieren cambiar el proyecto. Una vez que eso sucede, el proyecto se pone a consideración del cuerpo.
Mayans sostuvo que el debate de la reforma judicial en general y el papel de la presidenta de la Comisión de Asuntos Constitucionales en particular “fue impecable, fue atacada injustamente en un proyecto que también es impecable”. E insistió en que una vez que termina la miembro informante, la presidenta tiene que llamar a votación.
Reprochó luego “el show que se hace en cada sesión: le faltan el respeto a usted, le dicen cualquier cosa, y hablan 50 senadores a la vez… La metodología debe cumplirse -dijo-. Si todos queremos alterar el orden de funcionamiento, ni en el recinto, ni por la vía remota se puede sesionar. Necesitamos que se respeten las reglas de juego: cuando cierran los presidentes de bloque la única que puede hacer cambios a viva voz es la miembro informante. Así de sencillo”.
Y luego, en su particular estilo, el presidente del bloque oficialista continuó, ahora en referencia al presidente del interbloque JxC, que reclamó por la falta de reuniones de Labor: “Esta es la parte que no entendió esta gente que perdió las elecciones el año pasado: que nosotros somos la mayoría y no pueden imponernos a nosotros qué vamos a tratar, porque no son la mayoría. Hay un programa de gobierno que nos comprometimos a tratar”.
“Esta es la metodología vigente en el Senado de la Nación, si queremos funcionar como corresponde, tenemos que respetar las reglas de juego”, enfatizó, para luego seguir fustigando a la oposición: “Utilizan este esquema de terminar las sesiones con alto cuestionamiento para ver si pueden al día siguiente tener una foto con la política más importante que tiene la Argentina, que es usted. En esto consiste el show, en si pueden robar un poquito de cámara, si pueden tener un poquito de publicidad”.
Fuente: Parlamentario.com