Tramitó su ingreso y esperó paciente la designación del turno. Se organizó con otros estudiantes formoseños mediante el CEFUC para llegar hasta la provincia. Se encuentra aislada en la Escuela de Cadetes y manifestó su apoyo y agradecimiento a las medidas sanitarias llevadas adelante por el Gobierno de la provincia.
Carla es estudiante de diseño gráfico en Chaco, pero vive hace varios años en la provincia de Corrientes. Si bien es entrerriana, desde muy chica llegó a Formosa con su familia y la ilusión de una nueva vida.
El martes pasado, a las 03 AM, ella y un grupo de estudiantes formoseños que viven en Corrientes llegaron a Formosa en el marco del Programa de Ingreso Ordenado y Administrado a la provincia.
La joven dialogó con el programa Conexión Once que se transmite por Lapacho Canal 11 y brindó detalles acerca de los trámites para su ingreso, su posterior llegada, y su actual aislamiento preventivo y obligatorio en la Escuela de Cadetes de la Policía de la provincia.
“Hice el trámite como todos desde la página oficial del gobierno, tenés que ser paciente, esperar hasta que te habiliten”, sostuvo Carla; y agregó: “Nosotros venimos de una provincia donde hay transmisión comunitaria y donde todo se les fue de las manos”.
En ese sentido, la estudiante opinó: “Lo que hace el Gobierno me parece perfecto” y remarcó que “aunque la gente cree que es exagerado, es lo que nos mantiene a salvo a nosotros y nuestra familia” y por tal motivo “siempre fuimos pacientes, sabíamos que en algún momento íbamos a volver a casa y estábamos tranquilos con eso”.
Además, Carla se refirió a la situación epidemiológica que atraviesa la provincia de Corrientes y consideró que “ya se perdió el hilo”.
“Cuando nos tocó hisoparnos a nosotros, en Corrientes, te llamaban por lista y te decían si eras negativo o positivo; a una persona le dio positivo y ella les preguntó qué tenía que hacer y le dijeron que se aísle en su casa, pero no le acompañó nadie, quedaba en la responsabilidad de esa persona y no tenemos la certeza de si se va a cuidar o cuidar a otras personas, por eso se les fue de las manos”, manifestó.
En cuanto a la planificación de su regreso a la provincia, la joven confesó que “no sabíamos por dónde empezar” ya que al ser estudiantes universitarios no contaban con medios de movilidad propios.
“Nos contactaron los chicos del CEFUC (Centro de Estudiantes Formosa Unida en Corrientes), que también están en Corrientes y nos preguntaron si teníamos en qué volver, al decirles que no, armaron un grupo de Whats App con todas las personas de Corrientes que les habían aceptado el permiso, en ese espacio nos contactábamos entre todos y sumábamos tres personas para compartir un remis, entonces nos salía más barato”, relató.
Al llegar a la localidad de Mansilla, el CEFUC les consiguió un transporte que los llevó hasta Formosa Capital, “porque sino el remís nos salía como 8 mil pesos” pero “terminamos pagando entre 3 mil y 4 mil pesos que, dividido entre tres personas, se nos abarató muchísimo”.
El segundo destino fue la Unidad de Pronta Atención a la Emergencia COVID 19 (UPAC), donde fueron desinfectados, hisopados y posteriormente trasladados hasta la Escuela de Cadetes de la Policía de la Provincia.
“De mi parte quiero agradecer un montón a los cadetes, la policía, los oficiales porque se pusieron la 10 y nos cocinaron a las 3 de la mañana; llegamos con hambre, sed y dimos por sentado desayunar recién al otro día, pero nos trataron de diez y nos trajeron pollo al horno con fideos”, expresó Carla.
Formoseños por elección
Por último, la estudiante contó que relató esta experiencia en su perfil personal de Facebook “y la gente que está en contra del gobierno me empezó a insultar, a decir mentirosa, cabeza de termo, que me pagan por esto”.
“Nosotros somos entrerrianos, mi familia es de Entre Ríos, cuando éramos muy chicos vinimos a vivir a Formosa, es una provincia que nos acogió, nos adoptó y hoy es otra realidad para nosotros, porque allá mis papás se habían quedado sin trabajo, no teníamos donde vivir”, explicó.
Y continuó: “Laburando acá, porque son trabajadores autónomos, mamá es peluquera, papá es enfermero, hoy tenemos nuestra casa propia, nuestro auto, pudieron pagarle los estudios a mi hermana, hoy ella es licenciada, ahora me lo están pagando a mí, nosotros somos formoseños por elección, nadie me está obligando a hablar y a contar mi experiencia”.
En ese marco, Carla expuso que “eso es lo que a mi me duele, que todo el tiempo se quiere ensuciar” porque para ella “hay que agradecer que en Formosa no hay muertes y se puede estar tranquilo todavía”.
“Somos hijos del rigor, si te están diciendo que te cuiden, no te cuidás, para mi está perfecto lo que está haciendo el gobierno, ese es mi punto de vista por eso quise contar mi historia”, concluyó.