La misma consiste en un pago único de 4.185 pesos y están evaluando una metodología para facilitar el cobro en contexto de ASPO.
En diálogo con AGENFOR, la subsecretaria de Educación de la provincia, Analía Heizenreder, anunció que 3344 estudiantes secundarios de la modalidad de Educación Intercultural Bilingüe (EIB) fueron beneficiados con las becas nacionales destinadas a las comunidades originarias.
“Esto es parte de un programa que se viene dando y el año pasado en diciembre, comenzó la carga de datos; se cargaron más de 3800 alumnos que reunían los requisitos, pero algunos fueron bajados porque tenían otros beneficios”, indicó.
En ese sentido, la funcionaria manifestó que la provincia de Formosa es una de las jurisdicciones que obtuvo la mayor cantidad de becas y también la que más aspirantes pudo cargar al sistema, “gracias al trabajo ordenado y mancomunado de los estudiantes, los docentes MEMA y la coordinación de EIB”.
“Ahora estamos trabajando con la Dirección de administración y el banco Nación en la provincia para optimizar el lugar donde ir a cobrar, sabemos de las restricciones que existen, las limitaciones en el transporte y que no hay que moverse, entonces queremos acercar las bocas de pago a las comunidades”, anticipó.
En cuanto al beneficio, Heizenreder explicó que consiste en un único pago de 4185 pesos, “que pueden ser destinados a elementos escolares o lo que el estudiante necesite”.
“Son más de 3 mil familias beneficiadas, esto quiere decir que la educación es una cuestión de Estado y el Estado está donde debe estar, que es con el que más necesita”, aseveró.
Escuelas CAS
Por otro lado, la responsable del área se refirió a los establecimientos educativos devenidos en Centros de Asistencia Sanitaria (CAS) por el contexto de pandemia y aseguró que, aunque los estudiantes no asistan a las escuelas, las clases se sostienen con distintas modalidades.
“Si analizamos desde principio de año, las clases presenciales iniciaron en la provincia en tiempo y forma de acuerdo al calendario escolar, en ese tiempo solamente Formosa y Clorinda no comenzaron la presencialidad”, recordó.
Y agregó: “Después con las medidas que tomo Formosa preservando la salud de la familia y de nuestros estudiantes, las clases pasaron a ser a distancia desde sus diversos modos: virtual, formato papel, cuaderno de tareas, las escuelas tienen un muy buen trabajo en la provincia tanto de ruralidad como zonas urbanas”.
En ese marco, Heizenreder argumentó que, con el brote “no esperado” de casos de coronavirus en el territorio, las instituciones se utilizan como CAS, “porque hay personas que dan positivo en sus casas y comparten con muchas personas, la situación familiar no está dada como para que esa persona se aísle y tenga una buena atención”.
“También sabemos y el equipo de salud está en esto, la situación de un positivo puede cambiar en horas, entonces el Gobierno de la provincia de Formosa propició que los positivos estén en las escuelas que inmediatamente fueron equipadas para CAS”, reiteró.
Y expresó: “Sabemos que en la provincia tenemos escuelas con aulas amplias, ventiladas, cocina, sanitarios y también patios donde da el sol que es muy importante”.
Además, la subsecretaria señaló que, en el interior de la provincia, “la gente nos pide que habilitemos CAS” para tener un lugar cómodo y cercano donde transitar su infección por COVID, solo o con su grupo familiar, “allí están atendidos con servicios de comida y sanitarios”.
“Sabemos que en cada CAS hay agentes de salud que pueden rápidamente actuar ante una emergencia, en los CAS hay tubos de oxígeno, por ejemplo”, precisó.
Por último, Heizenreder esbozó que “la gente se cuida mucho pero no es suficiente” y admitió que, en el ámbito familiar, “cuesta más”.
“Los que tenemos hijos y padres con vida sabemos de qué se trata, así que es una actitud absolutamente responsable que un formoseño que de positivo y necesite aislarse, lo haga cerca de su casa en lo posible y bien atendido”, concluyó.