Se cuantifican en casi medio centenar los permisos autorizados y en trámite para acceder a recursos biológicos y genéticos de la flora y fauna autóctona, a fin de que investigadores puedan trabajar con materiales de la naturaleza local para muestras o estudios.
Con la resolución 40, en vigencia desde diciembre del 2015, se controla y supervisa el acceso a material biológico y genético de la flora y fauna local protegiendo así el patrimonio biológico de la provincia.
Y justamente ante el interés de científicos y estudiosos provinciales, nacionales e internacionales por los recursos biológicos de la provincia, es que se activa esta normativa en la protección de los mismos. Ello porque la información biológica y genética que se obtiene de la naturaleza puede ser utilizada para desarrollar tecnologías o para uso comercial o farmacéutico.
Se explico que “la provincia tiene el control sobre las mismas sino pierde toda posibilidad de reclamo o propiedad sobre los recursos naturales que le pertenecen por ley”, según se explico desde el ministerio de la Producción y Ambiente local.
Esta resolución es, también, un instrumento para que los investigadores reciban un reconocimiento y aval oficial para su trabajo que les sirve para la gestión de recursos en sus investigaciones.
Además, reciben la colaboración del Programa “Biodiversidad, Áreas Protegidas y Cambio Climático” perteneciente a la cartera productiva y ambiental para los trabajos a desarrollar en el territorio.
Como esta normativa existen otras en la mayoría de las provincias con reglas similares, aunque se destaco que “la de Formosa es una de las más actualizadas del país”.
Para gestionar este trámite gratuito, se deben dirigir a la dirección de Recursos Naturales y Gestión donde en conjunto con la dirección de Control y Fiscalización le otorgarán las guías de tránsito donde debe declarar el material que llevan con la información sobre el uso que se le va dar al mismo como destino final: sea un museo, la universidad, estudios, entre otros.