En esta altura del año el productor se prepara para recibir a los terneros. Según lo planificado cada vientre debería parir un ternero por año, trabajo que implica una preparación por parte de productores y operarios rurales, según explicaron técnicos del Ministerio de la Producción y Ambiente.
Entre las recomendaciones aseguraron que el adiestramiento sirve para tomar decisiones que lleven a evitar pérdidas innecesarias, las que en su mayoría pueden ser prevenidas. Disminuir los índices reproductivos de los rodeos durante el parto y posparto, mejora la eficiencia de las empresas ganaderas.
El parto
“Desde que la vaca queda preñada inicia la gestación, que finaliza transcurridos en promedio 285 días. Un parto a término se lleva a cabo en tres fases: una preparatoria, una fase de expulsión del o de los fetos y la última donde se produce la expulsión de la placenta o secundinas”, revelaron desde el Programa Ganadero Provincial (PGP).
Detallaron que en la fase preparatoria existen signos que permiten deducir que la vaca esta próxima a parir, por ejemplo, la inquietud del animal, la salida del tapón mucoso, vulva hinchada, ubre grande y goteo de leche. Una vez observados los síntomas, recomiendan mantener a las futuras madres en lugares tranquilos, potreros limpios, alejadas de otros animales y donde puedan ser vigiladas por el personal a cargo.
Cuando comienza la labor de parto, los profesionales recomiendan observar si el ternero sale normalmente dejar que la vaca para por sí sola. El parto normal dura aproximadamente entre 30 y 40 minutos; luego de este tiempo debería prestarse atención y evaluar la posibilidad de ayuda.
Después del parto (normal o asistido) recuerdan dejar el tiempo para que la madre atienda a su cría, que la limpie logrando que el recién nacido se levante y comience a mamar. Este contacto de la madre y cría produce la liberación de oxitocina que servirá para la expulsión de calostro y de la placenta que ocurre normalmente entre las dos y seis horas luego de la expulsión del feto.
Explicaron que los terneros normalmente intentan levantarse entre 20 y 30 minutos después de nacidos y en menos de una hora buscan la teta y maman por primera vez, en los partos trabajosos o demorados pueden tardar más.
Por último, destacaron llevar un calendario con las medidas sanitarias que deben realizar como la desinfección del ombligo de los terneros evitando posibles complicaciones como las miasis y una planificación de la actividad de cría contemplando los servicios hasta el destete, vital para asegurar los óptimos resultados que complementen el manejo previo brindado.