El doctor Orlando Amílcar Mendoza, director del Registro, Control y Fiscalización del Ministerio de la Producción y Ambiente, precisó que desde el área técnica se trabaja en una nueva modalidad de veda pesquera, “una medida mucho más protectora que la anterior”.
“Se adoptó la medida con un fuerte contenido biológico de suspender la actividad en el río Bermejo”, expuso el funcionario, remarcando que con respecto al río Paraguay “se está trabajando desde el área técnica, que en este caso es Recursos Naturales y Gestión a través del Programa de Biodiversidad y Cambio Climático, quienes están trabajando para empezar a debatir y a hablar sobre una nueva modalidad de veda”.
Explicó que el objetivo es “ir dejando de lado esa veda tradicional que tiene que ver con los años 80 y 90, en los cuales se suspendía de forma consecutiva la actividad, teniendo en cuenta que coincidía con el período de desove o reproducción de los peces”.
Refirió que sobre esta cuestión “los técnicos nos han explicado que no es así, puesto que la situación de desove o la reproducción de los peces se da cuando los valles de inundación se encuentran en condiciones óptimas, al igual que las condiciones climáticas, lo cual se da en nuestro río durante todo el año”.
En ese sentido, abundó diciendo que “la reproducción de los peces no se da necesariamente en el período de noviembre-diciembre, sino en todo el año”, apuntando “un ejemplo que dan los biólogos es la situación de la corvina, que empieza a desovar en los meses de febrero y marzo, por lo tanto nuestros peces van desovando durante todo el año, con lo cual es necesario ejercer una protección de ellos de todo el año”.
“Hay que ir adoptando un concepto de ordenamiento pesquero, que va a ir determinando las modalidades en las que se va a ir pescando, de manera en que habrá días en las que van a convivir dos modalidades, la comercial y la deportiva, y otros en los cuales van a tener que parar”, subrayó.
Indicó que “eso daría aproximadamente más de 102 días de veda, por lo cual estaríamos avanzando en una medida mucho más protectora que la anterior, con la que solamente protegíamos a la fauna ictícola durante 42 días en dos meses, cuando lo que se busca con estas medidas es la protección durante todo el año”.
«Por supuesto que esto va acompañado de un componente de contralor muy fuerte y estamos trabajando para ese fortalecimiento, ya que dicha medida va a necesitar de recursos humanos como también materiales, a los efectos de llevar adelante y resguardar que dicha modalidad funcione”, manifestó.
Finalmente, Mendoza aclaró que “conforme me ha explicado el área técnica se va a trabajar con una etapa piloto, que va a ser este año, de manera de hacer una evaluación de la misma, y una vez obtenidos los resultados se va a volver a evaluar para ver cómo vamos a avanzar en cuál de las modalidades”.