Acudir inmediatamente a la consulta médica ante la aparición de los síntomas es la recomendación fundamental de las autoridades sanitarias, a fin de confirmar o descartar la enfermedad para cuidar la salud del paciente y disponer las medidas de bloqueo necesarias para cortar la transmisión y evitar la propagación del virus.
La Directora de Epidemiología y Medicina Tropical de la cartera sanitaria provincial, doctora Claudia Rodríguez, dio a conocer que en las últimas horas, el Ministerio de Salud de la Nación emitió una alerta epidemiológica tras confirmarse un caso de sarampión importado en una niña de 6 años en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
Detalló que la menor, de nacionalidad ruso-argentina, llegó al país el 22 de enero procedente de Rusia, con escalas en Vietnam, Dubai y Brasil. El diagnóstico se confirmó mediante pruebas de laboratorio en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez y el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (INEI-ANLIS) “Carlos G. Malbrán”.
Precisó que la paciente presentó fiebre y exantema días después de su llegada, motivo por el cual fue llevada a la consulta médica. “Se informó también que, en este momento, se encuentra en buen estado general, cumpliendo con el aislamiento domiciliario”.
Al mismo tiempo “las autoridades sanitarias están realizando las investigaciones correspondientes y el rastreo de los contactos para evitar la propagación del virus”, dijo.
Ante esa situación, la médica resaltó la importancia de “hacer la consulta médica, rápida y temprana, cuando aparecen los primeros síntomas, como fiebre mayor a 38°, manchas rojas o erupciones en la piel (exantema)”.
Remarcó que eso posibilita, como ocurrió con el caso de la niña “que el equipo de salud disponga las acciones necesarias para confirmar o descartar el diagnóstico, como también para iniciar el control y el bloqueo, pertinentes para cortar la transmisión y evitar que se propague”.
Situación epidemiológica
Describió Rodríguez, que el sarampión es una enfermedad viral muy contagiosa y potencialmente grave, que se propaga fácilmente cuando la persona infectada elimina virus en las secreciones respiratorias al hablar, toser o estornudar, o por estar en contacto con cualquier objeto contaminado. El virus presente en el aire o sobre superficies infectadas sigue siendo activo y contagioso por periodos de hasta dos horas.
Puede presentarse en todas las edades “siendo de mayor gravedad en menores de 5 años o personas con desnutrición, en los cuales puede causar graves complicaciones respiratorias (como neumonía), enfermedades del sistema nervioso central (como convulsiones, meningoencefalitis, ceguera) y enfermedades tardías con complicaciones crónicas”.
Recordó que, si bien, la Argentina se declaró un país libre de sarampión en el 2000, desde entonces “se registraron brotes limitados de la enfermedad que duraron menos de un año.
Sin embargo “los casos importados, es decir, provenientes de otros países del mundo, representan un riesgo significativo, según lo establece la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya que en 2024 se notificaron más de 320.000 casos confirmados en 184 países, lo que refleja a su vez, un aumento de la enfermedad en el mundo”.
Estar vacunados es la única manera de prevenir el sarampión
Hizo hincapié, que frente a esa realidad “la única manera de prevenir el sarampión es tener completo y al día el esquema de vacunación. La vacuna está incluida en el Calendario, es obligatoria, gratuita y no requiere orden médica para su aplicación. Está disponible en los centros de salud y hospitales de la provincia, tanto en la Capital como en el interior”.
Detalló, que el esquema incluye dos dosis de la vacuna Triple Viral, destinada a prevenir el sarampión, la rubéola y paperas. La primera dosis debe aplicarse a los 12 meses y la segunda, a los cinco años de edad.
Por lo tanto, explicó que, entre los 12 meses y cuatro años inclusive, las niñas y niños deben tener aplicada una dosis de la vacuna Triple viral. Mientras que, los mayores de cinco años, adolescentes y personas adultas, deben tener aplicadas, al menos dos dosis de vacuna con componente contra el sarampión, vacuna Doble o Triple Viral.
Sobre eso aclaró, además, que las personas nacidas antes de 1965 no necesitan vacunarse porque se consideran protegidas por haber estado en contacto con el virus.